Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista

María Escoté: "Cerrar mi tienda fue lo mejor"

La diseñadora, jurado de 'Maestros de la costura' junto con Caprile y Palomo, cuenta cómo es el backstage del programa de televisión

Tal vez sea la más seria de los tres miembros del jurado de 'Maestros de la costura', pero en la nueva edición que se estrena esta noche en TVE1 asegura haber perdido los nervios iniciales, de modo que podremos ver la explosión de creatividad y personalidad que rige su vida personal y profesional. María Escoté, junto a Lorenzo Caprile y Alejandro Palomo, tratará de convertir a los doce aspirantes del taller televisivo en profesionales capaces de desarrollar su propio camino en el difícil mundo de la moda.

A base de constancia en su trabajo y de tomar decisiones arriesgadas a lo largo de su carrera, la diseñadora catalana se ha convertido en unas de las más exitosas del panorama nacional e internacional. Esta noche, además, se estrenará como concursante, ya que en esta segunda temporada los tres miembros del jurado deberán realizar sus propias pruebas para demostrar su maestría con la aguja.

-En 'Maestros de la costura' demostráis que el glamour que vemos sobre la pasarela requiere de mucho trabajo y tesón en el taller.

-Sí, totalmente. Lo mejor es poder mostrar y poner en valor un oficio como es la modistería y esos oficios artesanales tan antiguos que en los últimos años se están perdiendo. Ahora la gente se centra más en el diseño de moda y no en la costura y la verdad es que poder mostrar este trabajo técnico y a la vez creativo en televisión y de esta manera es un trabajo muy bonito.

-¿Cómo son los concursantes de este año?

-Creo que son doce aprendices maravillosos. Ya habían visto cómo era el programa y tenían más idea, así que ha habido un gran nivel de costura. Para nosotros, cuando llegamos al taller, es una sorpresa conocer a los doce aprendices que han sido seleccionados por la productora. Este año se han presentado 12.000 personas y estoy encantada con el casting.

-¿Te identificas con ellos? ¿Te recuerdan a tus inicios?

-Bueno, no me identifico con ellos porque cada uno es muy diferente y yo soy de otra manera, no estuve en un programa ni tuve esta oportunidad, pero sí me recuerdan esos inicios, sobre todo sus ganas de aprender, evolucionar y crecer dentro del mundo de la costura.

-¿Sigues la trayectoria de los concursantes del año pasado?

Sí, me hace muchísima ilusión. Ver cómo están creciendo y están haciendo realidad sus proyectos es de lo que más orgullosos podemos estar. Por ejemplo, ahora tengo anotada la fecha del desfile de Eduardo Navarrete en la Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid. Igual que Luisa, que ha pasado de tener un taller pequeño a tener uno más grande, ha hecho desfiles con ropa de niños y va a poder desfilar en la pasarela de moda flamenca que es lo que más ilusión le hacía. Alicia tiene su propio taller y su propia marca que vendió en El Corte Inglés con éxito. Antonio, con su tienda online y Mai, igual, con una tienda online y dos modistas en nómina... Todo esto es lo que más nos recompensa.

-Junto a Lorenzo Caprile y Alejandro Palomo formáis un jurado muy exigente, ¿cuál es el papel de cada uno y cuál es la relación entre vosotros?

-La verdad es que nosotros encajamos desde el principio. Nos admiramos y queremos muchísimo los tres, entonces ha sido maravilloso. Esta temporada cada uno hemos encontrado nuestro sitio y nos respetamos las manías y los criterios del otro. Yo sé que a Caprile le molesta muchísimo un mal corte, yo a lo mejor busco mucha personalidad, creatividad y riesgo y lo bueno de Palomo es que tiene las dos cosas, es muy maniático con la técnica y luego valora mucho la creatividad. Cada uno aporta algo diferente y creo que además nos compensamos muchísimo los tres.

-¿Te da vértigo exponerte y convertirte en un personaje público?

-Sí sentimos vértigo en la primera temporada y al principio estábamos un poco más asustados los tres porque para nosotros se trataba de una exposición mediática a la que tampoco estábamos tan acostumbrados. Aparte de la exposición que podíamos tener con la prensa de moda y en los desfiles, nosotros nos dedicamos a lo nuestro. Una vez hemos conocido el medio y el programa estamos más tranquilos y relajados y somos más nosotros.

Inicios en el negocio familiar

-Centrándonos ahora en tu trayectoria, creciste entre los pinceles de tu padre y los retales de tu madre, ¿qué te llevó a decantarte por la moda en vez de por la pintura?

-Mi padre es un pintor que trabaja mucho con el color y mi madre es restauradora de tejidos, es zurcidora. Entonces desde muy pequeñita me crié en esos dos mundos. Mi sueño es o hubiese sido ser pintora y no sé por qué acabé en la moda, pero me imagino que al final es lo que se me daba bien y me resultó más fácil ser diseñadora porque en mi casa ya había una infraestructura de tiendas de confección, arreglos y a medida y entré en este mundo. La pintura es un mundo bastante más difícil.

-Sin embargo hay muchos rasgos pictóricos en tus diseños...

-Sí, fusioné el mundo de la moda con la pintura. Para mí es muy importante el mundo del arte, estoy muy vinculada. Todos mis prints los diseño yo y todos mis colores los escojo yo. Ese momento de hacer mis propios tejidos con mis diseños y mis colores es el proceso creativo de mi trabajo que más disfruto y creo que eso también le da mucha identidad a la marca.

-Con 19 años ya confeccionabas prendas a medida en el negocio que tenía tu madre mientras lo alternabas con tus estudios de diseño y arte.

-Sí, mi madre montó su primer negocio cuando era muy jovencita y yo entré a aprender con las modistas y empecé a estudiar moda. Estudiaba y trabajaba a la vez. Y ya con 19 años abrí mi segunda tienda.

-¿Y qué aprendiste en este negocio familiar?

-Aprendí lo que es la profesión de la costura, que es lo que enseñamos en 'Maestros de la costura'. Eso no lo aprendí en la escuela cuando estudié Moda en Barcelona. Ahí aprendí diseño, cultura de moda, historia de la moda, pero lo que es el oficio lo aprendí en ese negocio, con esas modistas que trabajaban en el taller de la tienda y con mi tía, que es confeccionista.

-Es en 2006 cuando decidiste lanzar tu propia firma, ¿es difícil impulsar y mantener un negocio textil?

-Es complicadísimo. Hoy en día en España tener una pequeña estructura empresarial de moda es muy complicado. Hacer 'made in Spain', exportar al resto del mundo y vender no es nada fácil. Además, en mi caso empecé en una época muy difícil. Al poco de lanzar mi firma, vino la crisis en 2008 y fue un momento de cambios. Cataluña era una comunidad muy importante en la industria textil y había muchos telares y sitios de estampación. Se importaba mucho al resto de España de Europa y todo eso se cerró. De hecho, las fábricas con las que trabajaba cerraron. Fue entonces cuando me vine a Madrid.

-Fue una de las primeras diseñadoras en apostar por la venta on line.

-Sí, fui una de las primeras diseñadoras españolas en cerrar una tienda física y apostar por una tienda online. En esa época la tecnología empezaba a ser importante en los negocios de moda y decidí cerrar la tienda de Madrid. En aquel momento era una locura. Cerrar una tienda física para abrir una web era visto como ir a menos. La gente pensaba que no me había quedado otra, cuando fue al contrario. Cerrar la tienda fue lo mejor que me pasó a nivel de ventas y montar mi web me abrió mercado en Asia, empecé a vender en Hong Kong, Florencia y Miami. Supuso mi expansión. Pero todo aquello fue un riesgo y era algo que no sabía cómo iba a ir.

-¿Cómo defines tus diseños?

-Creo que tienen identidad y se puede identificar si una prenda es mía o no gracias al color, a los prints y a las siluetas. María Escoté es una marca un poco caótica, como soy yo, pero a la vez romántica e innovadora. Soy una mujer que trabajo desde la pasión y el corazón, entonces cuando estoy en malas épocas hago colecciones todas de negro y cada colección habla de mi momento personal, no sé separar lo personal de lo profesional.

-¿Todas las prendas que diseñas podrías ponértelas tú?

-Sí, porque cuando diseño una prenda el barómetro lo hago yo. Jamás diseño algo que no me pondría yo. Yo diseño para mí y pienso qué me apetecería esta temporada en mi armario.

-Comienza la Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid dentro de unos días. En esta ocasión no desfilas...

-No, esta temporada no desfilo. Voy a presentar una nueva colección pero debido al proceso creativo que requiere la voy a hacer fuera de IFEMA. Todavía no puedo contar más pero estoy a punto de cerrarla.

-¿Asistirás? ¿Qué desfile no piensas perderte?

-Sí, voy un poco justa porque estoy preparando esta nueva colección pero hay un par de desfiles quiero ir a ver. No me pienso perder el de mi gran amigo Juan Vidal y quiero ver el de Eduardo Navarrete.

-Acaban de celebrarse los Globos de Oro y seguido vienen el resto de ceremonias del cine, ¿qué te parece el debate abierto por las actrices en los últimos años, que reprenden las preguntas sobre sus vestidos y piden más preguntas sobre su trabajo?

-Si las actrices necesitan y creen que es necesario para evolucionar que en una alfombra roja no se hable de un traje yo lo respeto. Respeto la opinión de cada mujer en su profesión. Si ellas han decidido que no quieren que se hable de qué marca van o qué vestido llevan es una opción que tienen y sus motivos tendrán. Como compañeras las defenderé y apoyaré siempre.

-Son un montón las personas conocidas que recurren a ti cuando tienen un evento especial o incluso en su día a día: Alaska, María León, Rosalía, Paula Echevarría... o incluso fuera de nuestras fronteras, Miley Cyrus y Katy Perry han llevado diseños tuyos, ¿a quién te gustaría vestir que no lo hayas hecho ya?

-Me encanta vestir a celebrities, tanto internacionales como nacionales, pero lo que más ilusión me hace es ir por la calle y ver a gente anónima vestida de mí. Esa persona que ahorra y que se gasta su dinero para tener esa prenda de María Escoté es lo que más feliz me hace. También es verdad que hay muchas mujeres que admiro y que me gustaría vestir. Me ha dado mucha pena no poder vestir a Amy Winehouse, es algo que se me quedará ahí clavadito. Y ahora mismo me encantaría vestir a la cantante M.I.A., a la actriz Rooney Mara o a Penélope Cruz.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats