Hace más de una década pisó por primera vez la capital británica. Le pararon en Camden Town, le hicieron una foto y le ficharon en la MTV. No fue algo definitivo en su vida pero si una especie de punto de partida para el proyecto que ahora ve la luz. El alicantino Álex Amorós tenía entonces 18 años y aunque luego hizo muchos viajes de ida y vuelta a Barcelona, Valencia y Alicante para estudiar fotografía y montar una productora, hace cuatro decidió instalarse en Londres. El mundo de la imagen y el audiovisual son su forma de vida, sin olvidar la música, otro de los componentes fundamentales que le llevó a Londres.

Hace tres años, en 2015, empezó a trabajar en la idea de la incomunicación en esa gran ciudad que es multicultural e intergeneracional pero cuyos habitantes no interactúan. Comenzó a observar a la gente por la calle y a la salida del metro, y abordó a los transeúntes con su cámara. El resultado es Londoners, un fotolibro y una exposición, acompañados por un vídeo, que el próximo día 24 se presentan en una galería del centro de la capital británica.

Intentó parar a más de 2.000 personas, pudo fotografiar a un millar y en el libro recoge algo más de un centenar. «Pasaba mucho tiempo observando a las personas, me di cuenta de que había gente de todo tipo y etnias, y quise unificar esa idea y romper las barreras que existen en esa ciudad porque la gente no interactúa».

La labor psicológica, y también sociológica, fue fundamental en este proyecto, ya que «tenía que ir preguntando a la gente si quería hacerse un retrato; al final el aspecto psicológico es importante porque vas controlando los códigos para parar y hablar a la gente», asegura Amorós, que en 2016 participó en PhotoAlicante. «Tienes poco más de 10 segundos para disparar y tienes que ganarte su confianza; yo les decía que fueran ellos mismos porque así conseguía extraer su personalidad».

Romper barreras

Londoners, que se ha hecho realidad a través de crowdfunding en tan solo 16 días, ha servido para recoger las impresiones y el espíritu de la gente que habita esa ciudad. También para «romper esas barreras porque hay que generar relaciones interpersonales, algo que he podido hacer simplemente parando a la gente y haciéndoles un retrato». Ese era el objetivo. Pero al mismo tiempo, Álex Amorós se ha encontrado con que ha creado una red de relaciones que no imaginaba. «Hay anécdotas increíbles, como que una de las fotografiadas es la hija de Rod Stewart y yo no lo sabía, me enteré cuando vi que había subido la foto a redes sociales».

Además, a través de este proyecto «hay gente con la que he hecho amistad o se han convertido en clientes. Por ejemplo, la diseñadora del fotolibro también salió del proyecto, o a uno de los retratados le he hecho sus videoclips...he creado una serie de relaciones personales y profesionales que no esperaba». Incluso el retrato que ha utilizado como portada es de un joven con el que habló 15 segundos. «Luego perdí el contacto y a los seis o siete meses me localizó por Instagram y a partir de ahí hemos mantenido la relación».

Si algo ha sacado en claro es que «hay muchas personas con los mismos intereses a nivel cultural, musical o artístico; es una ciudad donde la creatividad está a la orden del día y mucha gente piensa como yo, que hay que romper esas barreras». Lo explica, o mejor dicho, lo explican los propios retratados en el vídeo que acompaña a la exposición. «Hablan de lo que piensan de Londres y de la vida allí, de lo que ha supuesto participar».

La exposición, compuesta por seis fotografías en tamaño grande y dos collages de unas 36 fotos, todas ellas en blanco y en negro «porque me gusta darle un cariz clásico», se verá también en Alicante y espera llevarla igualmente a Valencia y Madrid.

Álex Amorós, que lideró en Alicante durante siete años el grupo Fast Forward y ahora forma parte en Londres de la banda de psicodelia The Liquorice Experiment además de ser dj residente en varias salas londinenses, pretende que Londoners sea el princpio de un proyecto más ambicioso. «Quiero que esta sea la primera entrega de una trilogía que hable de las ciudades y sus gentes, de las personas, de lo que se respiera en el ambiente, de lo que siente la gente».

De momento, Londoners ya es una realidad y se podrá ver a partir del día 24 en la capital británica. Después comienza su historia, que el autor espera que tenga mucho recorrido.