El cantante catalán Joan Manuel Serrat interrumpió su concierto en L'Audirori del Forum de Barcelona para contestar a un espectador que le pedía que cantara en catalán, tras lo que el artista le pidió que le dejara continuar con el espectáculo como estaba diseñado.
«Siempre hay alguno que viene un poco despistado y no sabe dónde se mete», afirmó Serrat, que explicó que en su gira repasa canciones de su disco Mediterráneo, que tiene diez canciones, todas en castellano, compuestas en 1971.
Esta respuesta del cantautor catalán fue ayer uno de los debates más encendidos en redes sociales, en el que incluso participaron representantes políticos y culturales respaldando a Joan Manuel Serrat.
Así, en este sentido, el líder de Cs, Alber Rivera, indicó que «hablar, escribir o cantar en catalán y en castellano es un orgullo y una suerte, no un problema», y pidió que nunca se obligue a nadie a renunciar a una de sus lenguas, tras lo que calificó a Serrat de un barcelonés universal.
Por su parte, el diputado de ERC en el Congreso Gabriel Rufián afirmó también en Twitter que «interrumpir un concierto de Serrat por el idioma en el que canta es como criticar un Picasso por el marco con el que lo cuelgan».
El cantautor Ismael Serrano apuntó por su parte que «sí. Hay gente despistada. Serrat es un embajador de la cultura catalana allá donde va. Yo lo he visto cantar en catalán en diferentes ciudades latinoamericanas. Y he visto, allí, a la gente tararear esas mismas canciones. En un idioma que conoce gracias a él».
Y el periodista Jordi Évole fue todavía más contundente subiendo un extracto del vídeo en el que Serrat reprende al fan que le exigía cantar en catalán: «Dos minutos de Serrat. Tomar cada 8 horas para combatir la intolerancia. Venga de donde venga».
Otros ciudadanos también se han sumado a este apoyo a Serrat desde las redes sociales, y de hecho algunos recordaban los gestos que precisamente había tenido el cantautor con el catalán: «Hay que ser analfabeto histórico para pedirle a Serrat que cante en catalán y tacharlo de fascista cuando fue el primer artista que se negó a cantar en Eurovisión porque no podía hacerlo n catalán».
En la polémica intervención, Serrat recordó que « Mediterráneo es un disco compuesto en 1971 con 10 canciones, todas en castellano», y que su espectáculo las canta una a una, «en orden», prosiguió.
«Sé perfectamente que estoy en Barcelona, seguramente lo sepa antes que usted», dijo con contundencia. «Y desde antes que usted, estoy trabajando por hacer cosas en esta ciudad, así que le pido que me deje hacer mi espectáculo». Serrat concluyó diciendo que era la primera vez «después de girar por todo el mundo» que le hacían este tipo de recriminación.
