1. El mal querer, de Rosalía. Ubicua en las selecciones musicales de los medios más prestigiosos del mundo, el mérito de la española está en haber conquistado tanto los paladares más convencionales como los más alternativos con un planteamiento narrativo impecable y una fusión de flamenco, hip hop, electrónica y pop.

2. Vibras, de J Balvin. Punta de lanza de la conquista latina global, el colombiano superó a Drake como el artista con más reproducciones en Spotify, en parte por esta obra en la que depura y estiliza el reguetón para convertirlo en el género capaz de encabezar el próximo Primavera Sound. Brillo, con Rosalía, es uno de los temas de 2018, como Mi gente con Beyoncé lo fue en 2017.

3. BSO The Black Panther, de Kendrick Lamar. El genio creativo del rapero que maridó hip hop y jazz sigue en racha. Su anterior disco, Humble, consiguió 5 grammy este mismo año y ahora vuelve a liderar las quinielas de los Óscar de la música con la banda sonora que diseñó para una de las sorpresas fílmicas de 2018, una partitura inspirada en la blaixpoitation.

4. Invasion of privacy, de Cardi B. La única voz femenina capaz de romper el monopolio masculino del hip hop fue una debutante que con su estilo descarado y a la vez vulnerable ha acaparado cinco nominaciones a los Grammy de 2019, incluida una para I Like It, colaboración con J Balvin y Bad Bunny que actualiza el éxito latino I like it like that de los años 60.

5. Drake, Scorpio. Travis Scott, Post Malone, XXXTENTACION... Numerosas han sido las figuras de la música urbana que campan a sus anchas por lo mejor de 2018, pero es el canadiense quien vuelve a concluirlo como el artista más escuchado del planeta en Spotify gracias a cortes como God's plan.

6. Sweetener, de Ariana Grande.

7. Honey, de Robyn. Gran año para el pop en su vertiente más alternativa, con nuevos trabajos de Chvrches ( Love is dead), Troye Sivan ( Bloom), Lykke Li (so sad so sexy) y, sobre todo, de la francesa Christine And The Queens ( Chris). No decepcionó tampoco, ni de lejos, el ansiado retorno de la sueca tras 8 años de sequía, con 9 cortes de electropop infeccioso.

8. Joy As An Act of Resistance, de Idles. Aunque pudiera catalogarse este como uno de los años de menor incidencia del rock en cuanto a novedades, algunas hubo y buenas, como el segundo de estos británicos que revalorizan la fuerza subversiva del punk «como la osadía de una sonrisa desnuda en un mundo de mierda como este» y cortes como Colossus.

9. A Star Is Born, Lady Gaga y Bradley Cooper. El cine ha legado en estos meses algunos de los mejores repertorios ( Bohemian Rhapsody, The Black Panther, The Greatest Showman, Call Me By Your Name...). Incidiendo con acierto en el country épico y la balada, temas como Shallow lo tienen todo para instalarse en el imaginario sentimental colectivo y hacer de este el mejor álbum de Lady Gaga en años.

10. Air, de Morgan. Consenso general entre la prensa musical en considerarlo uno de los mejores discos españoles del año, el segundo autoeditado por esta banda que sigue abundando en la tradición rock estadounidense con el calor «soulero» de su poderosa vocalista, Nina.