La violencia sexual como arma de guerra y el cuerpo como espacio de lucha. Con estos dos conceptos, la fotógrafa alicantina Cristina de Middel ha creado un lenguaje y construído la historia El cuerpo como campo de batalla, que ayer se inauguró en el Centro Nobel de la Paz de Oslo. Elegida este año para realizar el proyecto fotográfico en torno a los ganadores de ese galardón, el ginecólogo Denis Mukwege y la activista yazidí Nadia Murad, la alicantina ha querido reflejar de forma conceptual la lucha de los dos galardonados contra la violencia sexual.

«Quería representar la violencia sexual que se ha infligido a personas de todo el mundo, tanto en el pasado como en el presente», asegura la fotógrafa, ganadora de Premio Nacional de Fotografía en 2017 y seleccionada por la Agencia Magnum para entrar en sus filas. «La violencia en sí misma es, en muchos casos, tan abrumadora que es difícil de transmitir lo suficiente a través del género documental. Espero que los conceptos que se muestran en estas fotos ayuden al espectador a tener una comprensión empática sobre las experiencias de las víctimas», explica Cristina de Middel.

La fotógrafa pasó un tiempo con ambos galardonados para poder conocer y reflejar así su trabajo. El pasado mes de noviembre, acompañó a Mukwege en el hospital que administra en la República Democrática del Congo, junto con algunas de las miles de mujeres que ha tratado. Nadia Murad, que durante años fue esclava sexual del Estado Islámico, fue fotografiada en París, entre reuniones con funcionarios gubernamentales y líderes mundiales.

Cristina de Middel utiliza la fotografía conceptual para ilustrar los crímenes atroces en los que ambos han trabajado tan incansablemente. Sus imágenes muestran pequeños soldados de juguete sobre una espalda desnuda; una niña tumbada en el suelo rodeada de balas y pistolas; una papaya cortada con un cuchillo, o imágenes de los propios galardonados en las tareas del trabajo que desarrollan. Con ello pretende concienciar de estos hechos y al mismo tiempo plantear qué se puede hacer para prevenir estas atrocidades.

Los visitantes de la exposición del Premio de la Paz de este año también tendrán la oportunidad de participar en la lucha para poner fin al uso de la violencia sexual en la guerra. Pueden mostrar su apoyo a las víctimas instando al director de la Fiscalía Pública de Noruega a llevar a los responsables de estos delitos ante la justicia.