n El valenciano de 35 años Nacho Ruipérez presentó ayer en el Club INFORMACIÓN El desentierro, película con la que debuta en el largometraje y que ha conseguido una decena de nominaciones en los premios organizados por el Instituto Valenciano de Cultura. «Ojalá nos caiga algún premio. Además, da la casualidad de que el día de la gala es el día que se estrena la película en los cines», apuntó ayer el director de esta cinta enmarcada en el thriller pero «contagiada de de otros géneros como el western o el cine noir. Es una película con muchas ramas en la que también hay humor gamberro y crítica política».

El desentierro, que abrirá el Festival de Cine de Sevilla el próximo día 10, cuenta la historia «de una persona desarraigada, que busca a su padre porque le mutilaron el pasado y con ello sale toda su historia. Es una película que habla de la memoria donde también hay mucha trama política y de corrupción» explicó el director de esta coproducción hispano-argentina de algo más de 2 millones de presupuesto «a la que hemos sacado mucho lustre», bromeó.

El largometraje cuenta con un elenco español y argentino protagonizado por Leonardo Sbaraglia, a quien el director esperó más de un año para que llevara el peso de El desentierro. También participan Ana Torrent, Francesc Garrido, Michel Noher, Jan Cornet o Jordi Rebellón. «Una vez Leo dijo que sí, el resto fue más fácil, pero les convencí con mucho Skype, siendo muy pesado y con alguna copita de vino». Su película, rodada en la zona arrocera de Valencia, tiene, a su juicio, «una vocación comercial pero con una parte autoral: hay cosas muy personales y muy sinceras de sobre la corrupción que hemos vivido muy de cerca durante muchos años».