Alrededor de 400 obras de 80 artistas y activistas conforman Alicante capital animal,Alicante capital animal exposición que llena las Cigarreras como «un grito desesperado, un aullido en defensa de los animales», aseguró ayer Ángela Molina, comisaria de esta colectiva organizada por el Consorcio de Museos, en colaboración con el Ayuntamiento de Alicante.

La muestra, que empezó en Madrid por iniciativa de la plataforma Capital Animal y se ha visto también en València, donde fue visitada por 50.000 personas, tiene como objetivo dar visibilidad «a la discriminación absoluta a seres que consideramos inferiores», pero «acercando la belleza de la naturaleza cuando los animales están en equilibrio».

El director del Consorcio de Museos, José Luis Pérez Pont, apuntó que «estas pequeñas acciones son las que hacen que el mundo cambie», mientras la concejal de Cultura, María Dolores Padilla, destacó que «contar con esta exposición es un auténtico lujo».

Entre las obras de la muestra, que se puede ver hasta el 9 de diciembre, se incluyen piezas de cuatro artistas alicantinos. Jesús Zuazo muestra trabajos de la Serie Esclavo (1989), sobre la utilización de animales para números circenses callejeros. Pepe Calvo, lleva piezas de su serie Tierra oscura (2014-2015). La obra de Ricardo Cases La caza del lobo congelado (2009) es un trabajo fotográfico en torno a la caza. Pau Sanz cuelga su obra Pato (2018), y, por último, la artista Verónica Perales, residente en Alicante, participa con dos obras tituiladas Grandes simios en positivo.

La exposición da cuenta también con la colaborción de la Sociedad Protectora de Animales y Ambiental de Ibi, el Albergue de Animales Abandonados San Antonio Abad y el Proyecto CES Aspe.