La película Climax, de Gaspar Noé, obtuvo ayer el galardón a la Mejor Película en el Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña, Sitges'18, y el filme Lazzaro Felice, de Alice Rohrwacher, los premios del jurado, de la crítica y del jurado joven.

Climax narra la evolución de una fiesta de una compañía de danza, que va subiendo de tono durante la noche por el efecto de las drogas hasta convertirse en un viaje a los infiernos.

Por su parte, el filme Lazzaro Felice es un relato a medio camino entre el cuento popular, el realismo mágico, el drama social y la ciencia-ficción de viajes en el tiempo, que protagoniza un hombre demasiado bueno y puro para este mundo.

La miembro del jurado Anaïs Emery calificó a Climax de película «sobresaliente» y «ejemplo de una nueva gramática del cine» que «demuestra que el género fantástico tiene mucha capacidad de innovación».

Además de la gala de clausura, Sitges contó ayer con la visita del realizador M. Night Shyamalan, quien defendió «la contención en el arte» de tal modo que, para él, es preferible «la tensión que generan unos ruiditos bien situados en una película, que los efectos especiales», señaló en su presentación de Glass, cuyo estreno está previsto para el próximo mes de enero cerrando una trilogía formada por El protegido (2000) y Múltiple (2017).