Las Lágrimas de Naraguyá, de Catalina González Vilar (Alicante, 1976), publicado por SM, ha sido seleccionado como título destacado dentro del prestigioso catálogo de literatura infantil y juvenil, White Ravens 2018, presentado ayer en la Feria del Libro de Fráncfort, que pone el foco en 200 obras escritas en 38 idiomas y procedentes de 59 países.

González Vilar forma ya parte de esta lista internacional, que el pasado año destacó también dos libros alicantinos: Dorothy. Déjale entrar, de Javier Sáez y Pablo Auladell, y El secreto de Enola, de Daniel Hernández Chambers

«Ha sido una alegría formar parte de la lista de este año», destacó ayer a este diario la autora de Las Lágrimas de Naraguyá, Las Lágrimas de Naraguyáuna novela de aventuras juvenil que se inspira en el realismo mágico, en la que la naturaleza juega un papel importante.

«Aparecer entre las recomendaciones de este año es un gran honor y ayudará a que la novela sea conocida y leída en otros lugares, así que es una gran noticia y un motivo de orgullo para mí», apuntó la escritora y antropóloga alicantina, que recordó que White Ravens (Cuervos Blancos) «es una lista de libros que elabora anualmente la Biblioteca Internacional de la Juventud de Múnich, una biblioteca extraordinaria dedicada en exclusiva al estudio y difusión de la literatura infantil y juvenil en todo el mundo».

El catálogo tiene una amplia difusión, llegando a las más importantes editoriales y organizaciones literarias del mundo. Este año figuran seis títulos españoles.

La alicantina hace en su libro un homenaje a las culturas de los pueblos indígenas, cuya diversidad y existencia están amenazadas por la expansión colonial y poscolonial, según se destaca en el catálogo, que promueve la tolerancia y la diversidad cultural.

Las Lágrimas de Naraguyá, como apuntó su autora, es una novela de aventuras, ambientada en el Amazonas de finales del XIX: «Cuenta la historia de Floren, un botánico que se adentra en la selva tratando de obtener noticias de un eminente profesor desaparecido. Allí se encontrará con Meteo, un buscador de meteoritos que a su vez rastrea una vieja leyenda conocida como las Lágrimas de Naraguyá, y juntos continuarán su búsqueda río arriba».

«El libro me está dando muchas alegrías. El curso pasado fue una de las novelas seleccionadas por el proyecto de animación a la lectura Azagal, organizado por el Cabildo de Tenerife, y este curso será una de las obras que lean los alumnos de los institutos de Cartagena dentro de uno de los proyectos de animación lectora más veteranos del país, el Premio Mandarache», declaró Catalina González, quien en 2016 se alzó con el Premio Álbum Ilustrado Edelvives 2016 por Una vajilla impar y obtuvo el premio El Barco de Vapor 2012 por El secreto del huevo azul. Sus anteriores novelas Los coleccionistas y Miss Taqui también fueron premiadas en 2011