El artista alcoyano Antoni Miró, autor de la muestra expuesta en el espacio ubicado en la antigua base del Alinghi, que ha generado polémica por la presencia de abundante simbología independentista, se mostró ayer «sorprendido» por el vacío que hicieron representantes de Compromís en la inauguración.

Ningún cargo municipal ni autonómico acudió a la muestra pese a que algunos de ellos como el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz o varios concejales del Ayuntamiento de València habían anunciado su presencia y se excusaron en el último momento. Miró asegura que quiere conocer qué ha pasado. «Algunos no pudieron venir, porque estaban fuera, otros no habrán querido venir y si ha pasado algo más no lo sé, pero me gustaría saberlo porque me parece un poco extraño y en los próximos días quiero averiguarlo».

El artista habló ayer con el presidente de las Corts, Enric Morera, que se encuentra en Bruselas para impulsar las lenguas minoritarias, que le trasladó que a su vuelta a València tiene previsto acudir a ver la exposición. «Yo pinto lo que hay en la sociedad -explica Miró- y algo pasa cuando la gente sale a la calle y se manifiesta, las imágenes están basadas en situaciones que han ocurrido y si pinto policías no quiere decir que esté en contra de la Policía, pinto después de que las cosas pasen y hay manifestaciones de todo el mundo», explicó ayer el pintor de Alcoi a este medio.

Miró recordó que prácticamente la misma serie con las mismas mujeres envueltas en senyeras y excepto cuatro piezas fueron expuestas en Alicante con gobiernos del PP, por eso no entiende que esta muestra haya causado tanto trastorno en València. «Por eso cuando Eusebio Monzó dice que es impresentable y vergonzoso pues pienso que el PP ya aceptó esta muestra en Alicante», añade.

Conflicto de competencias

Mientras, fuentes consultadas en la Conselleria de Educación y Cultura mostraron ayer a este diario su malestar por lo que consideran una invasión de competencias por parte de Presidencia de la Generalitat al desarrollar la muestra del artista de Alcoy.

En todo caso creen que la muestra debió organizarse de forma consensuada entre Presidencia de la Generalitat (PSPV) y la Conselleria de Educación y Cultura, en manos de Compromís. Insisten en que las competencias de Cultura están muy claras y que si Presidencia quiere montar una exposición e inaugurar un nuevo espacio expositivo tiene que hacerlo no por su cuenta, como ha ocurrido y de forma que los técnicos tengan algo que decir al respecto ya que son los que deben programar, dijeron. Las fuentes aseguran que no es forma de hacer las cosas, lo que desvela una nueva grieta en el Consell del Botànic.

En cambio, la directora general de Cultura, Carmen Amoraga (PSPV), cree que no puede existir malestar porque no es la primera actividad cultural que desarrolla Presidencia en colaboración con la conselleria, «al igual que hace con otro departamentos». El encuentro conmemorativo de los 80 años del congreso de intelectuales antifascistas sería un ejemplo.

En el grupo de trabajo creado para la ocasión, liderado por el asesor de Presidencia José Manuel Orengo, estaban la citada directora general, un asesor de la conselleria (de Compromís) y representantes del Ayuntamiento de València, La Marina y el IVAM. Amoraga recordó además que Transparencia, departamento en manos de Compromís, también ha organizado una muestra sobre el Tribunal de las Aguas de València con pinturas de Miró. Por tanto, «también habría malestar».

Por otra parte, fuentes de la dirección del PSPV interpretan que los cargos de Compromís están «intentando vestir» su ausencia de la exposición de un artista que, entre otras instituciones, ha sido invitado a exponer en el pasado por la Diputación de Alicante con el PP.