No estará sentado viendo y escuchando, pero sí estará ahí a través de las palabras con las que hizo teatro. José Antonio Peral o JD Sutton (Sutton-Surrey, 1939-Alicante, 2015), que es lo mismo, recibe mañana un homenaje en el Teatro Principal de Alicante para poner el foco en este dramaturgo en cierto modo olvidado. Abogado como profesión y autor como pasión, Peral firmó su último obra, La letra pequeña, meses antes de fallecer.

Y ese es precisamente el texto del que hoy se podrá ver una lectura dramatizada semimontada sobre el escenario del Principal (19 horas). De ello se encarga el también dramaturgo y director Juan Luis Mira que dirige este proyecto, con siete actores, «como homenaje a una trayectoria truncada porque aunque tuvo un gran parón, luego volvió y pese a tener 70 años, todavía tenía muchas cosas que contarnos».

Son nueve las obras teatrales que Sutton firmó a lo largo de su vida, aunque se mantuvo muchos años alejado de la escritura porque «había que comer». Fue en los últimos años cuando volvió a coger el lápiz. Fruto de esta etapa son Próxima estación (2010) y La letra pequeña (2014).

Toño Peral, su hijo, junto al director del Principal, Paco Sanguino, y a Mira son los impulsores de esta iniciativa que surgió «de forma espontánea», destaca. Se puso a trabajar «para hacer una pequeña dramaturgia con el objetivo de que se pudiera hacer la lectura dramatizada», y se rodeó de siete actores. «He buscado a colaboradores míos de siempre, Javier Monzó, Carlos Navas, Chelo Oñate, Josi Alvarado, Inmaculada Alcalá, Miguel A. Carrasco y Tatiana Carrión. Todos ellos compartirán escenario con el público, ya que los asistentes estarán sentados arriba junto a los actores.

La letra pequeña,La letra pequeña según Mira, «tiene muchas claves y muchos códigos; es un texto muy personal pero puedes ver a muchos autores». En su opinión, «hay una parte de teatro del absurdo, pero también una parte costumbrista, hay una mirada irónica sobre la gente que no quiere reconocer que los tiempos cambian; todo eso mezclado con amores pasados, conflictos psicológicos... lo que es la letra pequeña, las cosas que parecen más insignificantes pero que son determinantes en la vida».

La trayectoria de José Antonio Peral, que ganó el Premio Arniches en 1972 con Mañana, es el resultado de una evolución. «Aunque su trabajo tiene una base clásica, se daba cuenta de que había que contar cosas para que el espectador llegara a sus propias conclusiones y esa es una mirada muy actual».

Este reconocimiento a la figura de JD Sutton culminará el jueves con una mesa redonda sobre su figura organizada por el Instituto Juan Gil-Albert en la Casa Bardín, a las 19 horas. Contará con las intervenciones del diplomático Inocencio Arias, además del exdirector del Principal Luis de Castro; Paco Sanguino, y Juan Luis Mira, con el director del Gil-Albert, José Ferrándiz Lozano, como moderador.

«Queremos que sea algo más íntimo y personal porque de alguna manera queremos reconocer toda esa ilusión y ese talento que se nos quedó ahí; es una forma de decirle adiós desde un escenario», destaca Juan Luis Mira.