La compañía SpaceX ultimaba ayer los preparativos para el primer lanzamiento de su cohete gigante Falcon Heavy, previsto para hoy, con destino a la órbita de Marte y con un coche Tesla en su cápsula de carga.

Si se cumple el programa, el supercohete Falcon Heavy despegará desde la misma plataforma en Florida que llevó a los hombres a la luna hace medio siglo. El Falcon Heavy de SpaceX es el cohete más potente desde el cohete lunar Saturno V de la NASA. Su primera etapa consiste en tres núcleos del cohete convencional Falcon 9 que están diseñados para regresar a la Tierra después del lanzamiento, de forma muy parecida a los vuelos del Falcon 9 en solitario de la compañía.

El cohete de carga pesada mide 70 metros de altura y está diseñado para lanzar cargas útiles de hasta 57 toneladas métricas en el espacio. Puede llevar el doble de carga que su rival más cercano: el Delta IV Heavy construido por United Launch Alliance.

Para su vuelo de debut, el Falcon Heavy lleva en su compartimento de carga un vehículo Tesla Roadster. El presidente de Space X, Elon Musk, que también preside la firma automovilística Tesla, asegura que el lanzamiento, si tiene éxito, colocará la cápsula que lleva al Roadster en una órbita heliocéntrica que eventualmente enviará el coche eléctrico hasta Marte. En una publicación ayer en una conocida red social fotográfica, el multimillonario compartió una foto del automóvil deportivo eléctrico amarrado al cohete, con un maniquí que llevaba un traje espacial sentado en el asiento del conductor. Junto a la imagen, escribió «Starman in Red Roadster», una referencia al plan de la firma para reproducir Space Oddity, de David Bowie desde los altavoces del coche durante el lanzamiento.