La imagen icónica del cohete espacial estrellado en un ojo de la cara de la Luna en Le voyage dans la Lune, considerado el primer largometraje de la historia en 1902, es obra de Georges Méliès, el ilusionista francés que revolucionó la cinematografía como narrador de historias visuales. Desde ayer, y hasta el próximo 7 de septiembre, la tradicional carpa de La Caixa que se instala cada verano en la avenida de Niza de la playa de San Juan se convierte en dos contenedores de 200 metros cuadrados para mostrar al público los inicios del cine en una exposición dedicada a Méliès.

Empieza el espectáculo. Georges Méliès y el cine de 1900 es un recorrido por el origen del séptimo arte centrado en la figura de uno de los padres de la cinematografía, quien, tras asistir a la presentación del cinematógrafo de los hermanos Lumière en París en 1895, vio las posibilidades narrativas de este artefacto más allá de servir para realizar películas documentales o familiares.

«Méliès fue el primero en contar historias con nudo y desenlace con un cinematógrafo, vio que el cine era un medio para entretener y hacer disfrutar a la gente», explicó ayer el comisario de la muestra, Sergi Martín, sobre este dibujante, mago, director de teatro, decorador, técnico, productor, realizador y distribuidor de más de 500 películas entre 1986 y 1912.

Méliès construyó el primer estudio de rodaje, fundó su productora, Star Film, pero su Viaje a la Luna (1902) revolucionó el cine al considerarse el primer largometraje de la historia -14 minutos de metraje, nunca antes se había rodado una película tan larga- y la primera película de ciencia ficción, que contaba una historia con principio y fin, donde seis astronautas viajan en una cápsula espacial de la Tierra a la Luna, inspirado en las novelas de Julio Verne y H. G. Wells.

«Era tan largo que los feriantes no la querían pasar en sus proyecciones de feria, pero hizo un pase para ellos y quedaron encantados con la historia y el éxito fue espectacular», indicó el comisario sobre esta obra maestra que fue vista por millones de personas y «a partir de ahí se creó un público y se cuentan historias de forma larga. Si los Lumière inventaron el cinematógrafo, Méliès inventó el espectáculo cinematográfico».

Los 14 minutos de El viaje a la Luna se proyectan continuamente en la exposición, junto a copias de fotografías del rodaje de la película, maquetas, carteles y dibujos del director, además de otras películas cortas de Méliès, que se complementan con una selección de filmes de los hermanos Lumière que se proyectan a través de una reproducción de la máquina inventada por ellos.

La muestra se ha realizado con la participación de La Cinémathèque Française, que cuenta con la colección más importante a nivel mundial de objetos de Méliès, y también incluye objetos de época, una maqueta del estudio de Méliès y varias piezas audiovisuales producidas por La Caixa. Destacados cineastas como Juan Antonio Bayona o Borja Cobeaga explican el mundo de Méliès, así como su influencia en películas como Hugo de Martin Scorsese o en videoclips de bandas como los Smashing Pumpkins (Tonight, tonight).

La muestra tiene carácter itinerante y la entrada es libre, en horario de 11 a 14 horas y de 17 a 24 horas. También se ofrecen pases guiados. Las anteriores exposiciones de La Caixa en la playa de San Juan fueron visitadas por más de 35.000 personas.

El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, destacó que la muestra «trae la ilusión y la magia del cine a la playa» y es «una pieza más» que se suma a la oferta cultural.