La Jove Companya de L'Alacantí ya tiene nombres y apellidos. Quince son los actores y actrices seleccionados en la que es la primera promoción de este proyecto encabezado por el Teatro Principal de Alicante, con los diferentes talleres y escuelas de la comarca. Y con ellos, seis directores, responsables de esos centros: Mila García, Vera Lebrón, Andrés Ariza, Albert Ginés, Diego Juan y Noe Vicente, a quien se une Raquel Molina como productora.
Pero la Jove no es una compañía más. O sí. Es lo que quiere ser, porque esta agrupación nace con el objetivo bien marcado de convertirse en una agrupación teatral profesional, en el sentido, sobre todo, de propiciar la entrada en el mercado laboral del sector. «Nace como un centro de inmersión profesional y arrancamos con la generación de la crisis, jóvenes de entre 25 y 30 años que prácticamente no han tenido oportunidades de trabajar de forma profesional, por la crisis y porque las instituciones ante los recortes han optado por la contratación de compañías amateur», destacó ayer Paco Sanguino, director del Principal y abanderado de este proyecto.
El primer montaje se espera estrenar en el mes de julio, «aunque todavía no podemos decir dónde». Lo que está claro es que será un Shakespeare y que su dirección la asumirá en este caso Andrés Ariza. «No quiere decir que vayan a participar todos, pero queremos que sea profesional y los actores tendrán covers». Después de su estreno, la obra se presentará en distintos festivales hasta llevar a Alicante a finales de año, donde se programará en las sesiones del Principalito.
La Jove Companya nace con las miras puestas en tres años, por lo que serán tres títulos los que se desarrollen en esta primera etapa. Así que después del Shakespeare, llegará la traducción y versión de José Estruch de Rey Juan y después una dramaturgia sobre La Odisea realizada íntegramente por mujeres.
«Se va a trabajar de manera colaborativa, como un laboratorio; no hay proyectos cerrados sino ideas que se comparten entre las personas», afirmó Sanguino que anunció que la residencia de la compañía será el Principal. En cuanto a la financiación, «estamos trabajando en recabar fondos tanto públicos como privados, y soy bastante optimista».
Además, ya se está siguiendo «la estela» de otras agrupaciones de las mismas características para conectar e intercambiar experiencias, como es el caso de la Joven Compañía de Teatro Clásico de Madrid, aseguró Sanguino.
El director del primer montaje, Andrés Ariza, destacó que se trata de «una inserción laboral» y nuestro reto es «enseñarles cómo funciona y cómo se realiza una producción a nivel profesional».
«Estamos muy ilusionados por el proyecto -aseguró José López, uno de los actores- porque es una gran oportunidad». Para su compañera Raquel González, lo importante es «el hecho de hacernos visibles, de ver que hay gente con talento porque ahora o tienes que dedicarte a otra cosa o tienes que irte fuera». En este sentido, Elileia Olivas, también dramaturga, afirmó que «hay gente que tiene la valía y la capacidad de darlo todo, pero no puede llegar nunca a la excelencia en su trabajo por la precariedad de las circunstancias. Con esto tenemos la oportunidad de ser creativos, de poder equivocarnos y sacar nuestro potencial».
Miriam Giner, Laura Tendero, Irene Serrano, María Martínez, José Luis López, Lea Ríos, Carlos Peñalver, Virginia Zambrano, Toni Paya, José Maleno, Irene Coloma y Amine Hamada completan la Jove Companya. Aunque se irán incorporando más actores. Incluso «algún senior», afirmó Sanguino, «para que aporte su experiencia».
