Criando Ratas es un largometraje de género neoquinqui que narra las peripecias de delincuentes de barrio bajo en España. Se adentra en el submundo de las bandas juveniles callejeras, el contrabando, la drogadicción, los robos y los ajustes de cuentas. El largometraje está disponible en YouTube apostando por un modelo de distribución online y gratuito con el objeto de despertar una mirada crítica e invitar a la reflexión, tras la proyección del filme en salas culturales, centros penitenciarios y universidades.

Dirigida por Carlos Salado, "Criando Ratas" pretende renovar el género quinqui, reflejando la realidad social actual y heredando la obra de directores como Eloy de la Iglesia, José Antonio de la Loma, Carlos Saura o Paco Lara, que en los primeros años de la transición crearon un cine de culto que narraba una realidad social de forma sórdida y violenta, y cuyos protagonistas formaban muchas veces parte de esa realidad en su vida cotidiana.

Una película coral, cruda y dura que ha sido interpretada por los vecinos de esos barrios, ha tardado casi cinco años en ver la luz, impulsada con el esfuerzo desinteresado de un equipo de profesionales apasionados y más de 120 personas que participan en el reparto y que han luchado contra imponderables como las estancias en la cárcel del protagonista.

Cine de Guerrilla

Sin apenas presupuesto, y recibiendo los constantes cacheos de la policía, Criando Ratas se adentra en los barrios deprimidos de Alicante -Colonia Requena, Mil Viviendas o Virgen del Remedio-, como un documento social y cultural que refleja una problemática e invita a la reflexión.

Más de un centenar de vecinos de estos barrios y de zonas limítrofes, participaron en el rodaje, que cuenta con más de ochenta localizaciones. Jóvenes de la periferia que han vivido en primera persona el narcotráfico, la droga y la cárcel. Su director -Carlos Salado, cineasta y compositor, licenciado en el Centro de Estudios de Ciudad de la Luz-, asegura que "entre los actores se han encontrado personas con gran carisma y sobre los que se ha despertado el amor por el cine".

El rodaje no exento de inconvenientes, tuvo que paliar en 2011 con el ingreso en la cárcel de Ramón Guerrero, actor que encarna el papel protagonista de la película. Los acontecimientos obligaron a reestructurar el guion e introducir nuevos personajes. A lo largo de todo un año, Carlos Salado estuvo ayudándole a preparar su personaje, rodando durante los permisos penitenciarios.

Cine Neoquinqui:

Desde finales de los años 70 hasta mediados de los 80 se popularizó en España un género cinematográfico que elevaba la figura de jóvenes delincuentes que desafiaban a la autoridad y ganaban notoriedad por medio de sus acciones punibles. Figuras como el Vaquilla o el Torete, llegaron a convertirse en personajes insignes, en una España, que venía del ostracismo más absoluto de la dictadura y que experimentaba cambios sustanciales en política, en el seno de la sociedad y en el desarrollo de las ciudades.

Directores como Eloy de la Iglesia o José Antonio de la Loma, quisieron mostrar la realidad de un estrato de la sociedad que caiga en la droga y la delincuencia, durante una década pactista mientras ellos sentían que se les había dado la espalda. Si en algo se diferencian El Pico, Navajeros, Yo, "el Vaquilla", Lute: camina o revienta,€ de Criando Ratas, es que las primeras tenían una clara connotación crítica contra el sistema, mientras el actual filme, en términos de su director "no pretende dar lecciones de moral ni educar a nadie".

Criando Ratas es el precursor de la revisión del género quinqui, al que se le ha acuñado el término de cine neoquinqui. Así el libro Fuera de la Ley, editado por profesores de California, San Diego y las universidades de Alabama y Nueva York, dedica su último capítulo al largometraje: "Del cine quinqui al cine neoquinqui: desacuerdo, resistencia, revuelta. Colegas de Eloy de la Iglesia y Criando Ratas de Carlos Salado."

Sinopsis

"El cristo", conocido delincuente juvenil, tiene una deuda con uno los narcotraficantes más poderosos de su barrio. Bajo los efectos del consumo de sustancias estupefacientes e inmerso en un estado de desesperación, lleva a cabo todo tipo de actos delictivos para conseguir el dinero. Poco a poco, irá cometiendo errores que le harán ganarse muchos enemigos.

Paralelamente, la película muestra las aventuras y desventuras de tres chavales que están comenzando su carrera delictiva. Juntos sufrirán las consecuencias de su estilo de vida y comprenderán cuál es el precio a pagar.

El director

Carlos Salado, licenciado en comunicación audiovisual por Ciudad de la Luz, es compositor musical independiente y director de contenido audiovisual en la consultoría de comunicación Grupo Idex, donde asume la responsabilidad creativa de todos sus spots publicitarios. Entre sus últimos trabajos destacan la publicidad social del Club Atlético de Madrid, Mensajeros de la paz, Ayuda en Acción, ONU, ONCE, Plena Inclusión, FIAPAS, Pandora, Loewe, y Hills Pet, en los que han colaborado periodistas, artistas y deportistas de gran relieve profesional. Su trabajo ha sido reconocido a nivel nacional con el premio ALCE a la "Mejor Campaña Social" y el premio a la "Mejor Campaña Social Interactiva" en el Publifestival 2015 con el proyecto "Somos sus mayores fans" por la inclusión de las personas con discapacidad intelectual. Actualmente, se encuentra inmerso en un proyecto musical en el que colabora con Paco Ortega, reconocido productor musical en el ámbito nacional.