El Festival de Música de Tabarca tendrá una nueva oportunidad el próximo año a pesar de que la asistencia de público ha sido escasa, un 40% del aforo de media, según señaló el concejal de Cultura, Daniel Simón, que sin embargo apuesta por darle continuidad al festival una vez se analice qué ha fallado y cómo mejorar la segunda edición.
«Estamos muy contentos con la calidad artística del festival, que se ha hecho en un entorno único, y con la acogida de la isla -apuntó Simón- y menos contentos con la asistencia del público» a un evento que, pese a ser de pequeño formato, tenía previsto un aforo máximo de 800 personas y la respuesta no ha llegado a la mitad de las localidades.
«Nos sentaremos a ver qué ha pasado para intentar solventar los problemas, afinar con el formato y que el próximo año venga más gente», añadió el concejal, que en breve se reunirá con la asociación que lo ha organizado este año -Espai Mediterrani, adjudicataria del concurso público convocado p0or 20.000 euros- y con los vecinos de la isla, que han aplaudido la iniciativa.
Son varias las cuestiones que pueden haber incidido en la falta de público y, entre ellas, Simón destacó el retraso en los trámites burocráticos y en la publicidad del festival, así como los horarios para llegar y salir de la isla -no había barcos entre las 6 de la tarde y la 1 de la madrugada para volver a la península-, por lo que «quizá el horario deba replantearse y hacer un festival más de tarde que de tarde-noche porque había gente a la que se le hacía muy largo quedarse hasta la 1 de la mañana para volver a Alicante».
También la coincidencia de actos culturales este fin de semana ha jugado en contra: la Feria del Cómic y los Videojuegos en IFA, el Vegan Fest en Alicante o el Concierto de Bienvenida de la Universidad de Alicante, entre los más destacados. Para ello, Simón propone crear una agenda digital conjunta entre los ayuntamientos de Elche y Alicante y sus universidades.
Pese a todo, el responsable de Cultura no considera la falta de público un «pinchazo» ni tampoco que fuera precipitada su organización -apenas dos meses desde la convocatoria a la celebración- y añade que «tenemos ganas de dar una segunda oportunidad al festival y que se consolide, la fecha es golosa y tenemos que afinar en el horiario y en el formato. Los puntos negativos se pueden corregir y merece la pena apostar por él porque es un lujo. Si en la segunda el público no responde, ya tomaríamos otras decisiones».
Carmen Marí, de la asociación de vecinos de Tabarca, reiteró que los vecinos «estamos encantados de tener este festival. Ha sido muy respetuoso, nos ha dado vida y nos ha encantado, aunque no haya ido el público que se esperaba», tras indicar que «es básico mejorar la infraestructura de transportes».
El responsable de la asociación Espai Mediterrrani, Emilio Garrido, indicó que «la experiencia ha sido maravillosa y quizás nos pasamos de entusiasmo con el público, que no ha sido el esperado, pero la idea es magnífica y habrá que mejorarla». Garrido apunta que volverían a concursar «si se hace con más antelación y más publicidad» y quizá «considerando también al público que puede venir de Valencia».
