Ilustrador, realizador y acomodador de cine, Álex Rey ha querido hacer un homenaje al cine y al oficio del proyeccionista en su cortometraje Pop Corn, donde el último hombre en la Tierra descubre una sala de cine intacta.

Tras quince años de realizar cortos «sin pretensiones», este alicantino de 35 años decidió presentar en festivales su último trabajo de amor al cine -«de tono nostálgico, muy silencioso y de ciencia ficción», apunta- tras ver cómo sus compañeros proyeccionistas perdían su trabajo al ser sustituidos por proyectores digitales. Ahora, la cinta se mostrará el día 29 en la sección Panorama del Festival de Cine de Málaga.

«No opta a premio pero es un puntazo participar en esta sección, que ofrece un vistazo a nuevos realizadores, y solo somos nueve», señala Rey, que para él supone «el triunfo de un corto hecho con presupuesto inexistente, de menos de cien euros, rodado con mi cámara, llevando el equipo en mi coche y solo gastando un poco en comidas y atrezzo».

Pop Corn, rodado en Alicante, Torrevieja, Agost, Mutxamel y Sant Joan, «en paisajes desérticos, que aquí nos sobran», también está seleccionado en el Short Film Corner del Festival de Cannes, el mercado de cortometrajes del festival francés; en el Festival Iberoamericano de ABC y en el Radio City de Valencia. Además, su nuevo cortometraje de animación, Best seller, una crítica a la estupidez humana «hecho en casa», es finalista en el Notodofilmfest. «Mi sueño es dedicarme a la animación», apunta.