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El dibujante Enrique defiende desde el humor la libertad de las viñetas

Una de las tunas que participó ayer en el XXVI Certamen Nacional que se celebró en el Auditorio. pilar cortés

«La Asociación Nacional de Sirenas Españolas en asamblea celebrada con carácter de urgencia en aguas mediterráneas con motivo de la polémica suscitada por el cartel anunciador del XXVI Certamen Nacional de Tunas de Medicina hace constar, primero, su agradecimiento a la tuna de Medicina de Alicante por su serenata recibida en aguas de la playa del Postiguet, ya era hora de que alguien tuviera el detalle de cantarnos a nosotras. Segundo, dejar bien claro que un ser con medio cuerpo de pez nunca puede ser considerado una mujer, por tanto es improcedente calificar el cartel como sexista».

Así, con humor, y al final del Certamen Nacional de Tunas de Medicina organizado por la tuna de Alicante en el Auditorio Provincial, el dibujante de INFORMACIÓN, Enrique, zanjó ayer la polémica de esta semana después de que la Universidad Miguel Hernández (UMH) retirara la subvención al evento al considerar el cartel del ilustrador como sexista. Como se recordará, en la imagen aparecen unos tunos cantando al borde del mar mientras una sirena, a la que se deja ver parcialmente el pecho derecho, les observa.

El ilustrador, que pertenece y actuó ayer con la tuna, cerró su intervención a través del jocoso comunicado de las sirenas: «La naturaleza solo ha revestido de escamas la mitad de nuestro cuerpo dejándonos los pechos al aire, pero no nos quejamos, más vale eso que observar que otros las tienen delante de los ojos y no ven nada».

Para despachar el asunto, Enrique pidió al público y a sus compañeros que entonaran la canción «Cuando mi barca navega», que hace alusión a la sirenas, una melodía que hizo al público levantarse de sus asientos y acompañar a los tunos entre risas y aplausos.

Apoyos

Los miembros de la tuna de Medicina de Alicante se apresuraron en respaldar a su compañero Enrique y antes de su humorística intervención señalaron: «Tenemos una relación con la UMH, con poca gente joven que acude a todos los actos a los que nos llaman y contábamos con un dinero -1.000 euros- apalabrado con la universidad que a último momento se ha caído porque nos censuraron el cartel del certamen». Así, uno de los componentes de la tuna manifestó «qué le voy a enseñar yo a mis tunos nuevos si viene una señora y aprovechándose de su cargo nos dice que una cosa no se puede hacer y no tiene razón. Cuando no se tiene razón se habla y se dialoga y con nosotros no ha querido dialogar nadie. Somos una tuna mayor intentado resurgir pero orgullosa y con nosotros censura no hay».

No sólo la tuna de Medicina de Alicante rechazó la censura del cartel, otras, como la de Sevilla o Salamanca también mostraron su apoyo a través de canciones o interpretaciones graciosas en las que se pudo ver hasta «una sirena» sobre el escenario.

La tuna de Medicina de Alicante volvió a organizar un certamen nacional después de 22 años, en el que participaron 12 tunas de toda España.

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