En 1996 quedó finalista del Planeta con Te di la vida entera; en 2003 se alzó con el Fernando Lara de Novela por Lobas de Mar; en 2004 consiguió el Ciudad de Torrevieja por La Eternidad del instante, y ayer sumó un galardón más a su lista con La mujer que llora, obra con la que Zoé Valdés (La Habana, 1959) ganó el Premio Azorín de Novela, que desde hace dos décadas convocan conjuntamente la Diputación de Alicante y la editorial catalana con la que la autora publica desde 1996.

La mujer que llora, presentada con el título La salvaje inocencia y con el seudónimo Gloria Julián Cécil, recrea "en cierta forma de manera autobiográfica" el afán de una escritora por reflejar en su obra la vida de Dora Maar, la que fue amante de Picasso y una gran artista. Las primeras palabras de Zoé Valdés tras recoger en el ADDA de manos de la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, el galardón, dotado con 68.000 euros, fueron para mencionar a Azorín. "Muchas gracias a aquel librero de la calle Reina de La Habana que me dio los libros de Azorín, a través de los cuales pude conocer este país que es España, que me ha dado mucho".

La muer que llora, que llegará a las librerías el próximo 11 de abril, es, según la autora, "una novela sobre la investigación del arte, una reflexión de todos aquellos que amamos el arte, pero también sobre el abandono, la soledad, la alegría y la tristeza".

Precisamente tristeza es lo que se refleja en parte en su novela, que fue elegida por unanimidad por el jurado. "Yo tengo una gran pasión por la tristeza, por la melancolía y las obras que me provocan tristeza son las que más me enseñan", aseguró en referencia a la vida de Dora Maar, que vivió a la sombra de Picasso durante diez años y tras ser abandonada por él "se aisló del mundo".

Aunque no conoció a Maar personalmente sí que ha realizado una gran tarea de documentación sobre su figura. "Leí muchos libros sobre ella y hablé con algunas de las personas que tuvieron relación con ella y que aparecen en el libro, y lo que quería era no hacer una biografía sino darle voz, pero con la imaginación que es lo que tiene la literatura".

La autora de La nada cotidiana afirmó que su intención es que "se reconozca que al lado de ese genio que fue Picasso había una gran artista que había sido soporte sentimental pero también su conciencia social porque ella, que fue una de las grandes artistas surrealistas de su época, estaba más inmersa en lo que ocurría políticamente en el mundo". Además, Dora Maar fue quien fotografió plano a plano como creó Picasso el Guernica".

La novela, que ve la luz después de trabajar en ella durante seis años "pero con intervalos", tiene también una lectura feminista. "Con su obra, Dora y otras mujeres creadoras se impusieron; además de una gran artista, era una gran intelectual, de una gran cultura y de una gran sencillez como son las personas cultas".

El escritor Juan Eslava Galán, en nombre del jurado, destacó que la novela "nos ha encantado y emocionado, porque yo nunca he visto en ningún libro una mejor plasmación de la vida y la cultura de esa época, y entrevelado con eso la vida de una mujer, que gracias a esta novela escapa de la sombra bajo la que vivió junto a Picasso".

El jurado de esta edición estuvo integrado por el diputado de Cultura, Juan Bautista Roselló, que fue quien dio a conocer la novela premiada; los escritores Juan Eslava Galán, Nativel Preciado y Lola Beccaria; el catedrático de Lengua y Literatura y crítico literario Manuel Cifo; el periodista y escritor José Ferrándiz, y la directora adjunta de Editorial Planeta Marcela Serras. Como secretaria actuará la jefa de Servicio de Cultura de la institución provincial, María José Argudo.

La gala, que se celebró en el Auditorio de la Diputación de Alicante, fue presentada por la periodista Maribel Vilaplana y contó con la proyección de dos audiovisuales en los que se narraba en primera persona la vida de Azorín, a la vez que se proyectaban imágenes del escritor.

En esta edición quedaron finalistas dos novelas presentadas desde Alicante y otra que hablaba de corrupción en una localidad de la provincia.