Con 22 semanas de gestación fue operado del corazón, nació y gracias a esa operación, pues el niño tenía una cardiopatía congénita con ambos ventrículos funcionando, y ayer, dos años después, Carmelo "compareció" ante los medios de comunicación para demostrar que la técnica usada fue exitosa y que su estado clínico y desarrollo son satisfactorios.