No tienen capa, poderes ni aliados, pero se enfrentan cada día a malvados tan poderosos como la soledad, la enfermedad y la muerte. Son Los Increíbles, un trío de héroes cotidianos que el cineasta alicantino David Valero ha rescatado del anonimato en el que vivían su lucha para convertirlos en protagonistas de su último documental. La magia del cine convierte a Juan Eulalio, un hombre de mediana edad discapacitado y taciturno, en Ala Rota, un héroe que combate la soledad que se instaló en su vida cuando perdió la movilidad de su brazo derecho, a su mujer y la alegría de vivir tras un accidente de tráfico. Joana, una joven enferma, se transforma en la Mujer Radioactiva, una supermadre que levanta a su familia pese a recibir duras sesiones radioterapia para frenar el tumor de cuatro centímetros que crece en uno de sus pómulos. Por último, el documental de Valera no retrata a María como la nonagenaria con buen carácter y mejor memoria que es; sus ganas de vivir y la cámara del director han creado a La Dama de Hierro, marcada por la muerte de dos hijos, un marido y la convalecencia de un cáncer de colon que casi le cuesta la vida. "Me parecieron que eran tres personas increíbles, personajes que eran como superhéroes luchando contra distintos villanos", explica el autor del documental. Valero, ganador de varios premios como el Notodo de cortometrajes, pretende estrenar sus Increíbles a finales de este año.

"Rodaba un documental sobre la historia de Juan a finales de 2008 que se iba a llamar Ala Rota. En marzo me surgió la posibilidad de seguir el cáncer de una joven de 30 años, y la tercera historia me era muy cercana por tratarse de un familiar", explica el director de este "documental creativo" en el que el esteticismo del cine se pone al servicio de las historias reales de superación de estos tres alicantinos. Juan, María y Joana han consentido que la cámara de Valero se introduzca en su rutina diaria, sin distinguir entre si grababa paseos con el perro o sesiones de radioterapia. Hasta en sus momentos más íntimos. El director les ha facilitado una cámara para hacer una especie de bitácora. "Hay algunos momentos que son realmente duros, como uno en el que Juan se derrumba al pensar que no va a encontrar nunca a una mujer con la que compartir su vida", apunta el director, quien reconoce un 10% de ficción entre las 90 horas de material que ya tiene grabado y listo para montar mientras continúa tomando imágenes de sus Increíbles.

Valero ha inventado metáforas visuales protagonizadas por Juan, Joana y María "para dar un contrapunto poético a la escenas reales del documental". Una de esas "dramatizaciones" refleja por ejemplo la tozudez con que Juan trata de rehacer su vida sentimental tras haber sido abandonado por su mujer y rechazado por muchas cuando conocen su discapacidad. "Él suele pasear con Boti, su perra por las dunas de los Arenales del Sol. Un día encuentra un cartón para deslizarse por ellas, pero se atasca. Luego lo intenta con una alfombra, y tampoco, hasta que lo consigue llevando un trineo", describe el cineasta, que lleva un año y medio que Valero trabajando con estos tres personajes en una historia que pretende servir de inspiración para superar los problemas cotidianos al contar con el punto de vista de tres personas normales y corrientes.

La cinta está producida por Jaibo Films y patrocinada por el Ayuntamiento de San Vicente.