Berio (1925-2003);, uno de los revolucionarios de la música electroacústica, es uno de los creadores de referencia del siglo XX por su búsqueda de un lenguaje musical renovador.

En total 80 eventos en 18 lugares de la capital austríaca se podrán ver hasta el próximo primero de diciembre para tratar de acercar la música vanguardista al gran público, incluido una serie de conciertos dirigidos a los niños.

Una importante parte del festival estará dedicado a la obra de Berio, en la que gracias a 14 conciertos y películas explorarán la vida e influencias de quien se definía como un "pensador de la música".

Entre sus obras más destacadas figuran las óperas La Vera Storia (1978); y Un Re in Ascolto (1983);, salida de una colaboración con el escritor Italo Calvino.

En la agenda no están sólo actividades musicales, sino también exposiciones, danza, teatro y una retrospectiva del 8 al 11 de noviembre de la filmografía del director holandés Frank Scheffer, cuya carrera destaca por sus documentales dedicados a la música contemporánea.

Además de Berio, el festival está especialmente centrado en el trabajo experimental del músico austríaco Georg Friedrich Haas (1953);, cuya obra también tiene un lugar destacado en la programación.

La inauguración en el prestigios Konzerthaus corrió a cargo del Klangforum de Viena, dirigida por Beat Furrer, que interpretó el jueves un programa titulado "Free Radicals" (Radicales Libres); con diversas piezas de compositores modernos y contemporáneos como Arnold Schönberg, Karlheinz Stockhausen, John Cage e Iannis Xenakis.

Además, se proyectaron diversos contenidos visuales durante el concierto, desde cortometrajes del artista surrealista Man Ray, pasando por poemas visuales hasta el trabajo de creadores experimentales actuales como el cineasta Tim Macmillan.

Entre las piezas visuales hubo dos creadas exclusivamente para el festival por la realizadora Bady Minck en el que las notas musicales que tocaban la orquesta del Klangforum tomaban vida en la pantalla.

Minck fue también la responsable de escoger las piezas musicales y explicó a Efe que buscaba "hacer visual la música" a los espectadores.

Wien Modern fue credo en 1988 por el director italiano Claudio Abbado para crear un espacio en Viena para la composición contemporánea y ha obtenido un notable éxito entre un público joven y abierto a nuevas experiencias.