Con una duración aproximada de 3 horas y un grado de dificultad media, la ruta propuesta para conocer los bellos alrededores de Dénia, Cova de l'aigua-Racó del Bou, permite disfrutar de un agradable y reconfortante paseo por la Marina Alta , perfecto para un día en familia.
Saliendo desde el casco urbano (Plaza de Jaume I) accedemos por el Camí Pou de la Muntanya hasta la Ermita Pare Pere.
Siguiendo un camino de tierra, en el que encontramos un panel informativo junto a una cadena que impide el paso de vehículos a motor, y giramos a la izquierda en la bifurcación del Camí de la Colònia.
A pocos metros se deja este camino, tomando por la derecha la senda ascendente hacia la Cova de L'Aigua.
Pasamos por la zona de umbría del Montgó, declarada microreserva, en la que abundan gran variedad de especies vegetales. Helechos como el polipodio o plantas como el rusco y otras muchas típicas de las zonas humedas de las montañas mediterráneas; destaca la vegetación rupícola de carácter endémico como la «herba santa», el «desferracavalls» o la escabiosa de roca, entre otras. Por ello hay que caminar exclusivamente por la senda, evitando cualquier impacto.
Mientras ascendemos el paisaje se hace más impresionante y se puede abarcar con la vista, todo el golfo de Valencia, las montañas de la Safor, Cullera, el Mar Mediterráneo y, en días claros la Isla de Ibiza.
Tras tomar la bifurcación de la senda que va hacia el este llegamos a unas empinadas escaleras que llevan a la entrada de la cavidad donde encontramos 3 compartimentos de distintas épocas utilizados para embalsar agua. Sólo se accede al sector inicial de la cueva y es conveniente contar con una linterna.
Cova de l'aigua
Cova de l'aiguaEn la entrada encontramos una inscripción romana, datada del año 238 d. C., así como también algunos restos que evidencian su uso en época ibérica o en los siglos IV y V como espacio de culto, y más tarde en época islámica.
Se trata de una zona que recoge el agua de lluvia filtrada por la roca caliza que forma el Montgó y es retenida por un estrato de arcillas margosas impermeables. Llegó a tener una canalización de tuberías de barro para abastecer a la población asentada en su ladera en los siglos XVI y XVII.
Volviendo sobre nuestros pasos y siguiendo las bifurcaciones de la senda en dirección oeste, recorreremos la parte más frondosa de la umbría del Montgó, y podremos ver algunas de las especies más escasas del parque como fresnos de flor, durillos o cornicabras. Iremos descendiendo hasta el Racó de l'ull de Bou.
Racó de l'ull de Bou
Racó de l'ull de BouLlamado así por la forma que tienen los paredones de la montaña, dentro de esta amplia zona del Montgó, denominada «de umbría», destacan especies como el coscojar, el brezo o el palmito, entre otras.
Siguiendo la senda enlazamos con el final del Camí de la Colònia, por el oeste, y recorriéndolo regresamos al punto de partida (Ermita Pare Pere). Finaliza así este entretenido y bello paseo que podemos hacer en cualquier época del año, solos o en compañía de los más peques de la casa.
