Gromov, uno de los matemáticos más importantes de la actualidad, es considerado el responsable de gran parte de los avances registrados en geometría en el último medio siglo.

El jurado premió a Gromov por sus contribuciones "revolucionarias" a la geometría pero también por sus ideas generales, "profundamente originales", que han abierto también nuevas perspectivas en otras áreas de las matemáticas y seguirán siendo "fuente de inspiración para futuros descubrimientos".

El premiado, de 65 años, recibió el galardón y los 6 millones de coronas noruegas (700.000 euros) con que está dotado el "Abel".

El matemático ruso-francés fue recibido horas antes en audiencia por los reyes Harald y Sonia, y esta noche será el invitado principal de un banquete ofrecido en su honor por el Gobierno noruego en el palacio de Akershus en Oslo.

Gromov nació en Boksitogorsk (Rusia) en 1943 y se licenció y doctoró en la Universidad de Leningrado, donde trabajó como profesor asistente entre 1967 y 1974.

Desde 1982 ejerce la actividad docente en el Instituto de Estudios Científicos Superiores de Bures-sur-Yvette (al sur de París) y también es profesor en el Instituto Courant de Ciencias Matemáticas de la Universidad de Nueva York.

Nacionalizado francés en 1992, ha recibido multitud de galardones internacionales, como el premio Kioto de Ciencias Básicas (2002), el Balzan (1999), el Leroy P. Steele (1997), la medalla Lobatchewski (1997) y el premio Wolf (1993).

Además es miembro de la Academia Francesa de Ciencias y, como profesor extranjero, de la Academia Nacional de las Ciencias y la Academia Americana de Artes y Ciencias, ambas de Estados Unidos.

El premio "Abel" se denomina así en recuerdo del matemático noruego Niels Henrik Abel (1802-1829), y fue establecido por el Parlamento noruego en 2002, aunque la institución que le otorga es la Academia de las Ciencias y las Letras de este país.

La Academia elige el "Comité Abel", compuesto por cinco matemáticos reconocidos internacionalmente, que cada año seleccionan al ganador del premio.

Gromov sucede en el palmarés del "Abel" al estadounidense John Griggs Thompson y el francés Jacques Tits, distinguidos el año pasado por sus logros en el campo del álgebra, en particular por sentar las bases de la moderna teoría de grupos.

Los trabajos de restauración del Aula Magna de la Universidad de Oslo, habitual escenario de la ceremonia de entrega del premio, han obligado a trasladarla al Gamle Logen este año.