Resulta difícil medir el nivel de este Lucentum ante un rival como el Madrid, pero lo que es evidente es que ésta no es, por desgracia, la liga del equipo alicantino. La LEB es el escenario en el que habitará y allí el conjunto de Berrocal puede apuntar muy alto. Es indudable que este equipo va a pelear cada uno de los partidos, lo hizo ayer ante uno repleto de estrellas y lo hará ante unos rivales del mismo calado. Pocas conclusiones deparó el trofeo Spa Porta Maris que fue a manos de un Madrid que no pudo contar con Mirotic y que apretó en el último cuarto para dejar un marcador acorde con la diferencia de categoría.

Jesús Fernández va a ser grande en el Lucentum. Con un espíritu de lucha comparable al del añorado Ivanov va a conquistar muchas "pinturas". Rebotea y pelea con enorme intensidad. Se puede complementar a la perfección con Darryl Middleton, ayer el máximo anotador del equipo alicantino con 9 puntos.

También dejó muy buenas sensaciones Romà Bas, un escolta que demostró mucha soltura y que fue lo más destacado del conjunto de Berrocal. Al que no se pudo ver en todo su esplendor fue a Shaun Green. Demasiada rigidez arbitral le dejó casi sin demostrar nada. No podía faltar en el Centro de Tecnificación Guillermo Rejón. El exjugador lucentino entrena con el equipo a la espera de recibir alguna oferta ya que el pívot que cerrará la plantilla será Brooks Sales, que permanece a la espera de hacer oficial su incorporación. Decía, Rejón jugó, y además lo hizo a un gran nivel, peleó, anotó y reboteó ante jugadores de la talla de Slaughter o Reyes.

La diferencia fue abismal, pero el Lucentum dio buena imagen. No se descompuso en ningún momento y sólo la falta de acierto exterior ( al descanso 1 de 13 en triples) evitó un marcador más apretado. Agradaron las sensaciones en un partido que sirvió para presentar a un remozado equipo. No jugaron ni Moncasi ni Jódar, lesionados, pero se vio lo más importante, espíritu de lucha en la plantilla.

Las primeras diferencias del partido las marcó Begic. No tardó Slaughter en mostrar sus señas bajo el aro y Jesús Fernández ya agradaba, pero no andaba fino en anotación. Así, el primer cuarto acabó con un 8-17.

Rudy entró en acción con dos triples consecutivos que distanciaron al Madrid nada más comenzar el segundo acto. Tras un paréntesis con canastas de Bas y Jesús Fernández llegó el espectáculo de Slaughter con tres mates consecutivos impresionantes. El Lucentum quedó aturdido aunque le dio tiempo a recomponerse antes de llegar al descanso. 21-35 que pudo ser más ajustado si llegan a entrar los lanzamientos del Lucentum. Lo mejor, la lucha en el rebote. El conjunto alicantino capturó 19 rebotes por 15 de su rival. Excelente lucha ante un equipo infinitamente superior.

De nuevo Rudy saludó al Lucentum en el inicio del tercer cuarto con un triple. Soñar con alcanzar al Madrid era absurdo. Se trataba de disfrutar y así lo hicieron. Bien Middleton aunque algo fallón y buenos detalles de Bas.

En el último cuarto el Madrid apretó. Llegó Llull, Pocius...el Lucentum quedó a merced de lo que quisiera hacer el conjunto blanco. Sin duda lo mejor del cuarto fue la canasta del canterano Álex Gómez a aro pasado. Jugó poco pero demostró detalles interesantes.

El partido fue una anécdota, la hora de la verdad comienza el 7 de octubre, el arranque de la LEB, una categoría que el Lucentum luchará por abandonar pronto.

Marcus Slaughter recibió el premio al mejor del torneo

Faltó algo de ambiente en el Centro de Tecnificación. Alrededor de 2.000 espectadores se dieron cita en la presentación de un Lucentum prácticamente nuevo salvo Jódar. Espectaculares las pancartas que exhibieron los aficionados de la peña Kali poco antes de comenzar el encuentro. Sus cánticos fueron una constante en un choque que despertó menos expectación de la prevista. Al término del encuentro, Marcus Slaughter fue elegido mejor jugador del encuentro tras anotar 18 puntos en una auténtica exhibición bajo el aro. Domingo Luján, director del hotel Spa Porta Maris, y Mariano Postigo, concejal de Deportes, fueron los encargados de entregar los trofeos junto a la Bellea y a las Damas del Fòc. En el palco se encontraba Alberto Herreros en representación del Madrid. No faltó a la cita Pedro Ferrándiz, que no pasó desapercibido al lucir una llamativa camiseta de la selección española. Recibió un detalle del Madrid.