La Conselleria de Educación ha dado un toque a los institutos que imparten Formación Profesional (FP) en horario de tarde para que cumplan de manera escrupulosa con los horarios establecidos en la normativa educativa y así no se pongan en peligro las ayudas que la Generalitat Valenciana recibe del Fondo Social Europeo para financiar los estudios de Formación Profesional.

La inspección educativa ha detectado lo que viene siendo una práctica habitual en muchos institutos públicos con horario de tarde, y es que las clases se han ajustado durante los últimos años y duran realmente 50 minutos, en lugar de los 55 minutos que marca la normativa de la Conselleria de Educación.

La reacción del departamento de Vicent Marzà ha sido enviar un comunicado a los centros en los que se ha detectado esta anomalía, a través de la inspección educativa, para que realicen las modificaciones pertinentes y se cumpla a rajatabla con los horarios. Desde la Conselleria aseguran que la inspección recordaba todos los años a los centros la obligación de realizar clases de 55 minutos y que desde el curso pasado consta de forma específica en las instrucciones del inicio del curso.

Entre los centros aludidos hay quienes han acatado la orden de la Conselleria de Educación y han realizado el ajuste de las clases con el curso empezado, aunque ello ha causado un importante malestar entre el alumnado, que no entiende cómo se ha podido llevar a cabo una modificación de este tipo con el curso en marcha, ya que genera muchos desajustes.

Un ejemplo lo encontramos en el IES Victoria Kent de Elche, que cuenta con una importante oferta de ciclos de Formación Profesional que se imparte en horario vespertino. En este centro se han visto obligados a sumar cinco minutos más a cada una de las siete clases que se imparten por las tarde, más los dos descansos. Esto ha llevado a que las clases de última hora que antes terminaban a las 21.45 horas, ahora se extiendan hasta las 22.20 horas.

Un retraso de 35 minutos que genera problemas al alumnado que se traslada a estudiar a este instituto desde otras localidades de la comarca, y que dependen del servicio de transporte público para regresar a sus hogares.

El IES Victoria Kent de Elche ha sido uno de los primeros en modificar los horarios, pero se espera que sean más los que lo modifiquen en Elche y en otras localidades de la provincia donde se imparte FP en horario de tarde, y se había reducido la duración de las clases «de motu propio», según explicaron ayer a este diario fuentes de la Conselleria de Educación.

Rechazo

No obstante, hay centros que se oponen de forma rotunda a cumplir este requerimiento, ya que consideran que lo fundamental es que al cabo del curso de Formación Profesional se impartan un total de 2.000 horas.

Este es el caso del IES Canastrell, de San Vicente. El director de este centro, Carlos Navas, explicó que «hace 14 años decidimos ajustar la docencia como se lleva a cabo en las escuelas de adultos o en las escuelas oficiales de idiomas para evitar dar clase los viernes por la tarde, ya que la asistencia era muy baja». Por eso, Carlos Navas, que también forma parte del colectivo de directores de institutos, consideró que la «imposición de este horario demuestra un desconocimiento absoluto del sistema», y señaló que «lo importante es cumplir las 2.000 horas lectivas al cabo del curso».

El tema cobra más importancia en centros donde la mayor parte del alumnado procede otras localidades. Por poner ejemplos, en el IES Victoria Kent de Elche se estima que el 70% de su alumnado se desplaza desde otras localidades, y en el IES Canastrell de San Vicente el 60% de sus estudiantes proceden de otras poblaciones.

Para casos como estos, desde la Conselleria de Educación aseguraron ayer, una vez aparecieron las primeras quejas, que se puede pedir un ajuste del horario a la dirección territorial, pero que los centros deben comunicarlo por escrito, para que se estudie el caso y se autorice la modificación pertinente.

A este supuesto para revisar el horario la Conselleria de Educación también añade otro tipo de circunstancias especiales, como, por ejemplo, que el ciclo en cuestión sólo se imparta en el centro que pide un trato especial.

Medidas

Otra opción que tienen los institutos es recuperar toda la jornada lectiva de los viernes, para que cada día, de lunes a viernes, se impartan seis clases. Ahora muchos centros afectados están impartiendo siete clases de lunes a jueves, y unas pocas los viernes a primera hora de la tarde, para acabar antes que el resto de días. Un ejemplo de este horario, con seis clases cada día, lo tiene en Elche el IES Sixto Marco. El jefe de estudios del IES Sixto Marco, Joaquín Pareja, explicó que «nosotros tenemos los mismos horarios de mañana y de tarde, con seis franjas horarias, y por la tarde acabamos las clases a las 21.05 horas, con un descanso a media tarde de 20 minutos».