Unos 200 incendios seguían ardiendo este domingo en el sureste de Australia, donde las autoridades evaluaban los daños de la "catastrófica" jornada del sábado mientras crecían las críticas a la gestión de la crisis del primer ministro, Scott Morrison.

La bajada de casi 20 grados de las temperaturas dio un respiro a los bomberos, que este sábado, con fuertes vientos y máximas rozando en algunos puntos los 50 grados, tuvieron que elevar la alerta a nivel de emergencia en más de una veintena de focos.

Miles de voluntarios colaboran en las tareas de rescate y extinción, cada uno poniendo su granito de arena de la manera en que le es posible. Uno de ellos es el modelo e influencer Sam McGlone que, entre otras cosas, se dedica a viajar por el mundo y grabar lugares o situaciones insólitas. Desde hace más de una semana se encuentra en Australia, documentando las tareas de extinción de los incendios y echando una mano a los bomberos de la zona, que no dan abasto para controlar las llamas.

Sam consiguió rescatar el otro día a un bebé de canguro que se escondía del fuego bajo un montón de hojas, en su indefensión, y capturar el emotivo momento en un vídeo que está dando la vuelta al mundo.

Mientras los bomberos trabajaban para contener las llamas que arden desde hace meses y han calcinado una superficie superior a la de Costa Rica, el primer ministro tuvo que esforzarse hoy para apaciguar las críticas a su gestión en esta crisis.

El último motivo de controversia fue el anuncio el sábado de movilización de 3.000 reservistas y de una partida presupuestaria para alquilar cuatro hidroaviones, y su uso en un anuncio publicitario.