España se ha sumado a la ola de las docuseries true crime, reportajes de investigación de sucesos reales. Los últimos trabajos de producción nacional buceando en relevantes hechos de nuestra crónica negra no tienen nada que envidiar a otros títulos de las plataformas de pago como Making a Murderer y Wild, Wild Country en Netflix, o The Jinx (que inspiró al personaje de Colin Sweeney en The Good Wife) en HBO. Los dos gigantes del streaming han recuperado para incorporarlos a sus catálogos algunos trabajos ya emitidos en cadenas nacionales, mientras que han encargado a sus creadores títulos de producción propia. En Netflix hace tiempo que se cuenta con una buena recopilación de programas del Salvados de Jordi Évole para La Sexta. El caso Alcàsser ha sido uno de los títulos más vistos en Netflix tras su estreno la semana pasada, pero hay otras series documentales de producción nacional con la misma calidad. Esta semana repasamos en el blog los títulos true crime made in Spain a los que engancharnos en estas plataformas.

1) El caso Alcàsser (Netflix): Un crimen que conmocionó a toda España en 1993 y también simbolizó la llegada de la telebasura. El reportaje trata de explicar con rigor qué pasó en un tono muy alejado al circo que le ha acompañado desde siempre en la pequeña pantalla. Aquella fatídica noche muchos ya nos llevábamos las manos a la cabeza con el espectáculo que dio Nieves Herrero con ese famoso programa en directo. Pero después vinieron cosas mucho peores que no fueron fruto de una decisión errónea tomada a remolque de las prisas de la actualidad. Durante meses se alentaron teorías que no tenían ninguna base real, alentadas por personas que hicieron negocio por hacer espectáculo y no por informar. En la miniserie de Netflix los realizadores desmontan la teoría de la conspiración que durante años ha acompañado al macabro crimen, dejando en su sitio a quienes no eran más que charlatanes de feria capaces de contar lo que fuera por seguir permaneciendo en el centro de los focos, aprovechándose del dolor de un padre que llegó a perder el control. Puede que el reportaje aporte poca novedad para alguien que siguió el caso desde el primer día, pero es un homenaje necesario en pro del periodismo honesto. Quizá en la serie se queda un poco cojo todo lo referido a la fuga de Antonio Anglés. Estoy recordando otro bulo relacionado con este caso cuando el diario Ya, en manos del abogado Rodríguez Menéndez, publicó en 1997 la falsa exclusiva de que había encontrado al fugitivo español más buscado.

2) Muerte en León (HBO): El juicio a las tres acusadas por el asesinato en 2014 de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, es el hilo con el que el equipo dirigido por Justin Webster se adentra en las profundidades de este caso. Un retrato rigoroso de todos los implicados, con entrevistas a los protagonistas y los momentos más destacados del juicio para explicar cuál fue el móvil de Montserrat Domínguez para matar a tiros a quién había cercenado la ascendente carrera de su hija Triana. El crimen es el retrato de una etapa política en la que parecía que las mayorías eran carta blanca para que determinados personajes pudieran hacer lo que les viniera en gana. Muerte en León fue emitida originalmente en Antena 3 pero ha sido recuperada para HBO, donde se le ha añadido un capítulo especial final que es un resumen de todos los episodios y que profundiza en unos hechos detectados por el equipo de investigación cuando terminaba el montaje de la serie. Varias llamadas telefónicas que no fueron investigadas y que cuestionan la versión oficial, abriendo nuevos interrogantes sobre el crimen.

3) Lo que la verdad esconde: El caso Asunta (Netflix): El mismo equipo que acaba de reexaminar El caso Alcàsser ya hizo hace unos años esta otra serie documental para Antena 3 en la que se investigaba el proceso a Rosario Porto y Alfonso Basterra por el asesinato de su hija adoptiva Asunta. El reportaje deja una sensación bastante incómoda, ya que pone encima de la mesa todos los indicios que había contra los acusados, pero también aborda todas las lagunas que presentaba la investigación y cómo la magnificacion por parte de algunos programas de determinados hechos realmente fueron intrascendentes para el proceso, pero sí sirvieron para reforzar la culpabilidad de los acusados ante la opinión pública. No es un alegato a favor de la inocencia de los dos acusados, pero sí logra transmitir al espectador la incómoda duda de ¿y si estuvieran diciendo la verdad? Una de las pegas tiene respecto a otros títulos similares es que no ha contado con tantos protagonistas directos de los hechos dispuestos a ser entrevistados ante la cámara.

4) Examen de conciencia (Netflix): Trabajo de investigación sobre los casos de pederastia de la Iglesia en España. El documental pone voz a las víctimas de sus abusos que fueron silenciados en su día por una institución que en lugar de cortar el problema de raíz prefirió enterrarlo y ocultarlo. Uno de los momentos más sobrecogedores es cuando una de las víctimas graba con cámara oculta el reencuentro con la persona que abusó de él en su infancia. Incluso hay una entrevista con Joaquín Benítez, el único condenado por los abusos sexuales del llamado caso Maristas.

5) El pionero (HBO): El mismo equipo que realizó Muerte en León ha recibido un encargo de HBO para hacer una nueva serie documental, que promete ser uno de los hitos televisivos de este verano. La plataforma tiene previsto ofrecer el 7 de julio esta docuserie sobre la figura de Jesús Gil, el hombre que simbolizó la llegada de los primeros populismos a España de la mano de un electorado que ya estaba empezando a cansarse del bipartidismo PP-PSOE. Hoy en día se tiene muy claro el saqueo que sufrieron las arcas municipales de Marbella, pero en aquel entonces el partido de Gil empezaba a ganar elecciones en varios puntos de Andalucía hasta que, acorralado por la corrupción, no pudo presentarse a las elecciones municipales de 2007. Material audiovisual tendrán de sobra, porque Gil estaba permanentemente en la televisión y contaba con su propio programa en Tele 5.