Pudo haber sido el capitán elegido para explorar la galaxia y llegar donde ningún hombre ha llegado jamás. Sin embargo, los avatares del destino y las decisiones de los ejecutivos de la televisión le relegaron al olvido durante muchos años y a ser una mera curiosidad de museo. Cincuenta y seis años después de haber sido guardado en una vitrina, el capitán Cristopher Pike volverá a ponerse al mando de la Enterprise. En este renacer de la franquicia galáctica Star Trek, los productores de la CBS se han lanzado a explorar nuevos títulos para sus servicios de suscripción y han dado luz verde a una nueva serie. Star Trek: Strange New Worlds. Nuevos episodios que, en teoría, nos contarán las aventuras del capitán Pike y de Spock durante sus años de exploración de la galaxia. ¿Será una serie limitada o tendrá un recorrido a largo plazo? Como el personaje siempre ha estado marcado por la tragedia, eso de que llegue el anuncio de la serie en plena pandemia por el coronavirus hace que uno cruce los dedos.

En 1964 la CBS se debatía si daba luz verde a una serie ambientada en el espacio y titulada Star Trek que les planteó Gene Roddenberry. A los ejecutivos de la cadena no les terminaba de convencer el episodio piloto que se había filmado. Les parecía demasiado sesudo y temía que el público se aburriera. Aquel capítulo era una Star Trek en estado embrionario. Había otros personajes a los que conocemos hoy en día y el señor Spock el señor Spock(Leonard Nimoy) se permitía sonreír y expresar emociones. Nada parecido al estirado vulcano que luego interpretó en pantalla. Los uniformes eran diferentes. E incluso la serie tenía otro protagonista. ¿Kirk? ¿Quién es Kirk? Al mando de la Enterprise estaba el capitán Cristopher Pike. El personaje estaba interpretado por una estrella de la gran pantalla durante la década de los 50, Jeffrey Hunter. El actor era el joven cowboy que acompañaba a John Wayne a la búsqueda de su sobrina raptada por los comanches en la obra maestra del western de John Ford, Centauros del Desierto. También encarnó a Jesucristo en la película de Nicholas Ray, Rey de Reyes. Con el cambio de década, la estrella empezó su declive. Hunter fijó la vista hacia el medio que por aquel entonces muchos de sus compañeros de profesión despreciaban, la televisión. Y en ese contexto le surgió la oportunidad de ser el protagonista de Star Trek. Eso de que los ejecutivos de la cadena ningunearan el episodio piloto rodado no debió sentarle bien. Cuando los productores pidieron a Roddenberry más capítulos para estudiar el potencial de la serie, Hunter ya no estaba disponible. Hubo que cambiar a su protagonista y fue así como William Shatner se hizo con el papel del capitán James T. Kirk. El resto es historia.

Con el relevo al frente de la serie, el episodio filmado no servía ya para nada. Aún así pudo aprovecharse cuando, hacia el final de la primera temporada, la producción acumulaba un retraso importante. A Roddenberry se le ocurrió recuperar las escenas de aquel material desechado para incluirlos a modo de flashback en un capítulo doble. La historia que se contaba en el metraje reciclado habría ocurrido trece años antes, cuando Spock estaba a las órdenes de Pike. En el nuevo montaje, el vulcaniano de orejas puntiagudas recibía un encargo de quien había sido su capitán antes de Kirk que le hacía rebelarse contra la Flota Estelar. En las escenas nuevas ambientadas en el presente de la serie, hubo que cambiar al actor, porque Hunter no debía estar por la labor de retomar su papel. Esta sustitución se justificó postrando al capitán Pike en una silla de ruedas, con el pelo encanecido, el rostro lleno de cicatrices, e incapaz de hablar. Sólo unas luces en su silla le permitía expresar expresiones tan sencillas como sí o no. El episodio doble llevó por título La colección de fieras.

Al actor que no pudo comandar una de las naves más famosas de la historia de la televisión le esperaba un destino mucho más trágico que el de haberse quedado sin el papel. Hunter murió en su casa en 1969 con 43 años como consecuencia de una caída. Un accidente en los meses previos le había provocado varias hemorragias cerebrales, algo que pudo tener alguna relación con el desvanecimiento que provocó su trágica desaparición. Aunque no se inspiró en él directamente, Hunter simbolizaba ese tipo de actor que Quentin Tarantino intentaba mostrarnos con el personaje de Rick Dalton (Leonardo diCaprio) en Érase una vez en Hollywood. Dos curiosidades: Sharon Tate, personaje clave de aquella película, murió asesinada tres meses después de la muerte de Hunter; y Quentin Tarantino se ha estado postulando para hacer su propia versión de Star Trek, aunque dudo que ese proyecto cristalice alguna vez.

Con los años, la figura del capitán Cristopher Pike se ha ido reivindicando. Aquel episodio piloto rechazado no se emitió con su montaje original, tal y como había sido concebido, hasta 1988. Con la remasterización de la serie clásica, se acabó colocando como el primer capítulo de toda la saga. Pero el malogrado capitán cobró aún más relevancia con el reinicio de la saga llevado a cabo por J. J. Abrams en el año 2009. En la nueva línea temporal alternativa que abría la película, Cristopher Pike pasó a estar interpretado por el veterano Bruce Greenwood. Pike ya no sólo fue el mentor de Spock, sino también el de James T. Kirk y fue la persona que le apadrinó para que entrara en la Flota Estelar cuando todos le veían como un rebelde sin causa. Desgraciadamente, al Pike de Abrams también le esperaba un trágico destino. Murió asesinado por Khan, uno de los enemigos emblemáticos de Kirk, en la película Star Trek: In to the Darkness (2013).

Esta nueva muerte no supuso el final del personaje. Cristopher Pike apareció por sorpresa en la segunda temporada de Star Trek Discovery el año pasado, encarnado por un nuevo actor, Anson Mount. Durante ese año, Pike se convirtió en el superior de Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) en un arco argumental que perfectamente podría haberse titulado En busca de Spock. Fue allí donde por fin pudimos ver al personaje en toda su salsa comandando una nave estelar. La serie dejó claro que este Pike era el mismo que vimos en la serie clásica original y que le esperaba el mismo destino que el que vimos en La colección de fieras. Las cronologías oficiales dicen que Spock y Pike estuvieron juntos en la Enterprise durante diez años. O sea que potencial para hacer una nueva serie hay. No sabemos si será más un spin off de la serie clásica o de la nueva Discovery.

¿La nueva serie tratará de adentrarse en todo ese amplio periodo por explorar de la saga o será un evento limitado para ver como al personaje le alcanza su trágico destino? El título de la serie es Star Trek Strange New Worlds, que es exactamente el mismo que tuvo un libro de relatos que se publicó en el año 2007 con motivo del 50 aniversario de la franquicia. En él, se recogían distintos relatos independientes y escritos por fans inspirados en las distintas series y películas de la saga. ¿El título es porque se pretende ir alternando la aparición de distintos personajes protagonistas en sus temporadas o habrá estabilidad en el reparto? Star Trek Strange New Worlds es una oportunidad para que la serie vuelva a sus orígenes mientras se va haciendo lavados de cara para las nuevas generaciones. ¿Romperá Pike su maldición?