Sevilla tiene un color especial, sigue teniendo su duende, como dice la canción y también posee un metropolitano con una línea en superficie, que nos lleva por la Sevilla monumental y es conocida como Metrocentro.
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El tranvía parte de la estación de San Bernardo y se dirige, por la avenida Carlos V, a su primera parada, Prado de San Sebastián, muy cerca del Parque de María Luisa.
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El Parque de María Luisa bien merece un paseo por él, a pie o en coche de caballos. En sus cuarenta hectáreas encontraremos la plaza de España, con su singular edificio construido para el Exposición Iberoamericana de 1929 y en el que, seguro, buscaremos el nombre de nuestra provincia en los pequeños murales de azulejos que hay en los cuarenta y ocho bancos adosados al edificio.
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Después de parar en Prado de San Sebastián el tranvía continúa por la calle San Fernando, pasando por la Real Fábrica de Tabacos, una construcción del siglo XVII que actualmente alberga parte de la Universidad de Sevilla y el hotel Alfonso XIII, llegando a su siguiente parada, Puerta de Jerez.
Puerta de Jerez es la plaza que tiene la fuente de Híspalis, una fuente muy querida por la familia roja y blanca del Sánchez Pizjuán. Está a trescientos metros de la Torre del Oro y del puente que nos lleva la otra orilla del río Guadalquivir. La Torre del Oro es una construcción del siglo XIII, que tenía la finalidad de defender el puerto fluvial, a la que podemos subir previo pago de entrada.
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Si nuestra visita a Sevilla coincide con la Semana Santa no podremos continuar nuestro paseo en Metrocentro, ya que su recorrido, desde Puerta de Jerez coincide con la carrera oficial de las procesiones. Si no es así, continuaremos en el tranvía hasta su siguiente parada, Archivo de Indias.
El nombre de la parada lo toma del edificio cercano, que alberga más de cuarenta y tres mil documentos que recogen tres siglos de la presencia española en el Nuevo Mundo y que está junto a una de las catedrales más grandes de Europa, la Catedral de Sevilla.
Cuando en 1248 Fernando III llegó a Sevilla encontró una mezquita con su sahn y minarete y, como era costumbre en la reconquista, le colocó una cruz. En 1401 se empieza a levantar la actual catedral sobre el solar de la antigua mezquita, que fue derruida y solo se conservó su patio, el actual Patio de los Naranjos y su minarete que transformado, ha llegado hoy a nosotros como La Giralda, la torre campanario de ciento cuatro metros que se divisa desde toda la ciudad y desde la que podremos ver los jardines del Real Alcázar, un palacio que, junto a la catedral y el Archivo de Indias, ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.
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El tranvía enfila su recorrido final por la avenida de la Constitución, llegando a fin de trayecto en Plaza Nueva, donde se encuentra la puerta principal del Ayuntamiento, un edificio flanqueado por dos plazas, la Nueva y la de San Francisco.
Si Sevilla no nos ha enamorado todavía, desde la plaza San Francisco podremos recorrer la muy sevillana calle Sierpes para estar con su gente, para que nos enamore por su manera de ser y por su calor.
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Cómo llegar: con el tren de alta velocidad podemos llegar desde Barcelona, Madrid y Valencia, sin transbordos. Por avión, entre otros aeropuertos, desde Asturias, Gran Canaria, La Coruña, Palma de Mallorca, Tenerife y Valencia. Ver enlace para ver destinos
http://www.aena.es/es/aeropuerto-sevilla/destinos.html
Fotografías y vídeo de J. Cintas:
1. La Giralda.
2. Plaza de España.
3. Banco dedicado a la provincia de Alicante en la Plaza de España.
4. Río Guadalquivir y Torre del Oro.
5. Catedral de Sevilla.
6. Plaza Nueva.
7. Metrocentro.
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