Situada en la región italiana de Emilia-Romaña, Bolonia es una ciudad que en la Edad Media contaba con más de cien torres, construidas, probablemente, como símbolo de poder de las familias boloñesas. Es, también, una ciudad que asociamos a la reforma universitaria con el Plan Bolonia y una ciudad que sufrió el terrorismo brutal en su Estación Central de ferrocarril.
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En la Estación Central de ferrocarril iniciamos nuestro recorrido por la ciudad boloñesa, lugar al que también llega el autobús del aeropuerto. En el andén uno veremos una placa que recuerda el atentado ocurrido el día 2 de agosto de 1980, atribuido al fascismo y que se llevó la vida de 85 personas. En la sala de espera podremos dar nombre a las víctimas, una placa relaciona los ochenta y cinco nombres y sus edades.
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Desde la estación recorreremos la calle porticada de la Independencia. En nuestro paseo por sus pórticos descubriremos una calle muy comercial y veremos una estatua ecuestre de Garibaldi, colaborador en la independencia y unificación de Italia, país que conmemoró su 150 aniversario durante el año 2011. También veremos la Iglesia de San Pedro y al final de su recorrido, habremos llegado al corazón de la ciudad, la plaza Mayor.
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La fuente de Neptuno nos da la bienvenida a la plaza Mayor, flanqueada por el Palacio D´Accursio, sede del Ayuntamiento boloñés, que alberga también dos museos, el Morandi y las Colecciones Municipales de Arte. En su fachada veremos un mural compuesto por fotografías de personas que lucharon en la Resistencia, desde 1943 a 1945 en Bolonia. El Palacio Dei Notai da paso a la Basílica de San Petronio, un templo de gran tamaño que se empezó a construir en 1390, finalizando sus obras en el siglo XVII. Al este de la plaza está el Palacio Dei Banchi y, al oeste, el Palacio Re Enzo.
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Muy cerca de la plaza Mayor nos espera el símbolo de Bolonia, Las Dos Torres. La Garisenda comenzó a construirse hacia el año 1120, pero se paralizó por la inclinación de la torre. A su lado se construyó la Asinelli, alcanzando una altura de noventa y siete metros. Pagando entrada podremos subir a lo alto de la Torre Asinelli, pero debemos tener en cuenta que la subida se hace por una pequeña escalera vertiginosa de madera.
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Desde los noventa y siete metros de altura de la Torre Asinelli veremos todo el centro histórico, descubriendo alguna torre más y añadiendo el color de los tejados, al rojo, como un color más de Bolonia.
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Cómo llegar: Ryanair comunica el aeropuerto alicantino con el aeropuerto boloñés, llamado Guglielmo Marconi.
Qué comer: la cocina boloñesa nos ofrece la pasta en su variedad de tallarines, los tagliatelle se acompañan con una salsa bautizada con el nombre de la ciudad.
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Fotografías y vídeo de J.Cintas:
1- Centro de Bolonia.
2- Andén uno.
3- Vestíbulo de la estación.
4- Calle de la Independencia.
5- Plaza Mayor.
6- Las Dos Torres.
7- Interior de la Torre Asinelli.
8- Plaza Mayor desde la Torre Asinelli.
9- Tagliatelle
