La Audiencia ha condenado a dos acusados por un un alijo de un kilo de MDMA y medio de cocaína intervenidos por la Policía en un piso de Benidorm, según la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. A uno le impone siete años de cárcel y al segundo otros tres años y medio. El fallo absuelve a una tercera acusada que se había empadronado allí pocos días antes de la operación, al no considerar probado que la mujer supiera que su compañero de piso se dedicara al tráfico de drogas. La mujer, que estaba defendida por el abogado Jorge Martínez Navas, llegó a estar en prisión provisional por estos hechos.
La operación policial se desarrolló el 4 de diciembre de 2019. La Policía estaba sometiendo el inmueble a vigilancia, ante la sospecha de que pudiera tratarse de un punto de venta de drogas. Los tres fueron detenidos cuando llegaban al edificio y un día más tarde se practicó un registro donde se hallaron 898 gramos de MDMA y 472 gramos de cocaína.
La mujer, de 34 años, se había empadronado en la vivienda pocos días antes y solía pernoctar allí alguna noche. La acusada manifestó que el vivir con sus padres la impedía conseguir una ayuda económica, motivo por el que se empadronó en la casa de su amigo, desconociendo que hubiera droga . Los propios policías declararon que mientras estaban vigilando la vivienda no sabían que se iban a encontrar a una tercera persona y que el día de la operación fue la primera vez que vieron a la acusada.
La Audiencia señala que ningún dato objetivo avalaba que esta acusada participara en el delito de tráfico de drogas por el que han sido condenados los otros dos implicados, uno de ellos era su compañero de piso y habitación. La droga se encontraba en el armario de él. La mujer adujo que tenía ropa allí por si a los Servicios Sociales se les ocurriía hacer una inspección para comprobar que ése era su domicilio.
