Cristóbal Ronda lleva desde que comenzó el estado de alarma dedicado a coordinar la Red de Ayuda Colectiva (RAC) que el Ayuntamiento de Benidorm puso en marcha el 18 de marzo. Esta iniciativa pretendía reunir a voluntarios que ayudaran a aquellos más vulnerables y que necesitaban ayuda para pasar la cuarentena de la crisis sanitaria del coronavirus. Tres meses después, su trabajo se ha ido ampliando a atender necesidades económicas o de familias que no pueden poner un plato de comida en la mesas por haber perdido todos sus ingresos. Y seguirán haciéndolo hasta que todo acabe.
P ¿En qué consiste la RAC?
R Con el estado de alarma, desde el Ayuntamiento de Benidorm nos pusimos en movimiento para ver qué se podía hacer para ayudar a los ciudadanos. El 18 de marzo comenzó esta iniciativa. Al principio surge como apoyo a las personas que necesitan ayuda como de compra de alimentos, medicamentos, apoyo psicológico... Un solicitante que la pedía y un voluntario que la prestaba desinteresadamente. Lo fundamental es ese voluntario y la red de solidaridad.
P ¿Cómo ha sido la evolución del servicio municipal en estos tres meses?
R Según iba pasando el confinamiento, la demanda y las peticiones fueron mayores y hemos tenido que ir adaptando y evolucionando la Red a las necesidades con servicio de comida a domicilio, de comida cedida por restaurantes que la reparten los voluntarios... y ahora ya estamos atendiendo otras cuestiones como necesidades económicas.
P ¿Cuánta gente forma esta Red de Ayuda Colectiva?
R Tenemos ahora mismo 560 voluntarios, una cifra menor que las solicitudes que ascienden a 650. El primer día se inscribieron 112 voluntarios y luego tuvimos una avalancha.
P ¿Han notado un incremento de peticiones de ayuda?
R Las solicitudes han ido cambiando. Hemos tenido una media de 25 solicitudes al día, el 90% era de compra o alimentos el primer mes; los quince días siguientes eran mitad de este tipo y el resto más de servicio; después se unieron mucha de falta de recursos económicos. Al principio era un voluntario para atender a una persona y ahora se ha extendido a cualquier servicio necesario en cualquier parte.
P ¿Con qué recursos se trabaja?
R Se trabaja con aportaciones. Tenemos servicios como el «Menjadors a casa» que da menús a más de 1.000 escolares; se reparte de Cáritas; de las parroquias; las de los restaurantes que ceden gratuitamente menús... Con todo lo que nos llega.
P ¿Cómo se gestiona la RAC?
R Los solicitantes pueden hacerlo por teléfono o por la web que tiene el #RAC. Eso genera una petición que se estudia y se rellena un formulario. A partir de ahí se hace la distinción, si es un caso de Bienestar Social o de otra concejalía.
P ¿Y cuánto se tarda en responder esas peticiones?
R Normalmente se hace al día siguiente. Si es un servicio para comprar o ir a la farmacia, se da aviso a la Policía para que el voluntario pueda desplazarse sin problema. Si hay gente que necesita ayuda económicas, se envía toda la documentación que necesita presentar y le ayudamos.
P ¿Y los voluntarios?
R Se pueden ofrecer a través de teléfono e Internet y especifican hasta dónde pueden llegar, si es solo para comprar o más cosas. Se hace una criba por aquellos que no están en grupos de riesgo y también se mira la cercanía de cada solicitante. Y, sobre todo, nos aseguramos que cumplen con las medidas sanitarias y tienen mascarillas y demás elementos para no poner a nadie en riesgo.
P ¿Qué peticiones son las que más se repiten?
R Lo que más piden los usuarios es recursos económicos y sobre todo alimentos. Hay muchas familias que se han quedado sin ingresos y tienen miembros a su cargo. Están desesperados y lo que necesitan es comida.
P ¿Cuál es el perfil de usuarios?
R El perfil de usuarios ha cambiado en un mes, de personas mayores o vulnerables, que necesitaban el servicio de compra, a gente de 35 o 37 años que se han quedado sin trabajo y necesitan alimentos para sus hijos. Hay incluso voluntarios que ahora atendemos. Hay gente que llama desesperada. A partir del primer mes, aquellos que se han quedado sin trabajo, por ejemplo del sector servicios, han aumentado.
P ¿A cuánta gente se está atendiendo aún en la desescalada?
R Hemos acabado el ciclo de todas las personas solicitantes, que pueden haber alcanzado las 1.500. Pero no paramos, continuamos dando servicio de comidas dos veces a la semana en los cinco puntos que el Ayuntamiento tiene estipulados.
P ¿En algún momento se han visto desbordados?
R Ha habido días muy duros porque no es solo coordinar sino que todo funcione y que llegue todo a todos. Desbordados no, pero llamadas constantes y reiterativas de gente con muchas necesidades; y se han gestionado cosas más complejas.
P ¿Hasta cuando estará operativa la Red de Ayuda?
R Vamos a continuar hasta que podamos y podamos dar servicio a todos. No sé cuánto será pero nadie se podrá recuperar tan pronto, tristemente. En la medida que se pueda, ayudaremos a todo aquel que lo requiera, desde las concejalías que estamos coordinadas y desde el mismo Ayuntamiento con ayudas.
