Sin fiestas este año en Altea. Este martes, la concejala de Fiestas del Ayuntamiento de Altea, Marta Lloret, anunció que se suspenden todas las fiestas de los barrios del municipio que se celebran durante el verano, entre finales de mayo y primeros de septiembre, a causa de la pandemia del COVID-19. A falta de saber que sucederá con las fiestas de invierno que se celebran en Altea la Vella durante diciembre (Santa Bárbara y La Purísima), el resto de festividades se trasladarán al año 2021.
En Altea son 11 fiestas de barrio que tienen lugar durante los veranos, además de la del Castell de l'Olla (segundo sábado de agosto). La concejala de Fiestas señaló este jueves que tras acordar a finales de abril con la comisión de las fiestas patronales del Cristo del Sagrario y con la Federació de Moros i Cristians Sant Blai la suspensión de las Fiestas Mayores de Altea que debían de celebrarse entre el 25 y el 29 de ante la incertidumbre originada por el COVID-19 y el Estado de Alarma decretado a consecuencia de la crisis sanitaria, y para evitar "un mayor riesgo de transmisión del coronavirus en los acontecimientos festeros, dada la aglomeración de personas existente en los mismos", comenzó a mantener reuniones con las distintas comisiones festeras de los barrios alteanos, "para analizar los pros y contras de mantenerlas o suspenderlas". Al final, la pasada semana se mantuvo una reunión con todas las comisiones de fiestas, y tras un largo debate, "acordamos suspender todos los festejos y mantener a las mismas comisiones para que organicen sus respectivas fiestas en 2021". La edil recordó, igualmente, que el Castell de l'Olla de este año, que debía celebrarse el próximo 8 de agosto, también se suspendió a mediados de mayo. Y añadió que el dinero de presupuestos municipales destinados a este evento y las Fiestas Patronales y de Moros y Cristianos "se destinarán para las causas sociales del municipio".
Así las cosas, las fiestas de la Santísima Trinidad que se celebran a finales de mayo; de Sant Joan con su "plantà de l'arbret" que está declarada como Bien de Relevancia Local, y Sant Antoni, que se celebran en junio; de Sant Pere, Sant Jaume y Santa Anna, en el mes de julio; Sant Roc, Sant Llorenç, Sant Isidre y Sant Lluís, en el mes de agosto; y Sant Tomàs, en el mes de septiembre, se aplazan al 2021. "Sus respectivas comisiones están de acuerdo y quieren continuar con el fin de disfrutar de sus fiestas más queridas del año próximo", indicó Lloret.
La edil añadió que con respecto a la celebración de las fiestas de Santa Bàrbara y la Puríssima que se celebran en diciembre en Altea la Vella, "estamos valorando la situación de estas fiestas de barrio de invierno, pues tal vez la situación de la pandemia haya cambiado y las podamos celebrar en gran parte y disfrutar de una vertiente de nuestra cultura, como son las fiestas".
