El Ayuntamiento de Benidorm ha dado autorización a más de un centenar de bares y restaurantes para poder ampliar sus terrazas y ocupar más espacio en la vía pública. La medida, consensuada con el sector para paliar los efectos de la pandemia por el covid-19, pretende ayudar a los hosteleros a recuperar negocio y paliar de esta forma las pérdidas ocasionadas durante el confinamiento, así como las que pudieran derivarse tambié ahora, una vez que muchos locales han vuelto a abrir sus puertas, aunque con las restricciones impuestas en cada una de las fases de la desescalada.
En concreto, el concejal de Comercio, Aperturas y Seguridad Ciudadana, Lorenzo Martínez, indicó que el Consistorio ha dado permiso a un total de 117 establecimientos para poder ampliar la zona ocupada por los veladores, muchos de ellos en el casco antiguo pero también en otros barrios de la ciudad, como La Cala o la zona de Foietes-Colonia Madrid.
Como ya avanzaron en su día el edil del área y el alcalde de la ciudad, Toni Pérez, el Ayuntamiento acordó con la asociación local de bares y restaurantes Abreca la posibilidad de permitir que dichos locales pudieran ampliar la superficie que ocupan sus terrazas en la vía pública de manera provisional, como medida excepcional para evitar el cierre de cientos de negocios. Para ello, anunció la creación de una comisión mixta formada por técnicos municipales, hosteleros y vecinos, para estudiar caso por caso y articular medidas de apoyo a este sector.
Para ser autorizados, los establecimientos debían remitir al Consistorio una propuesta de disposición de las mesas y sillas en sus terrazas en base a los aforos permitidos, que con las restricciones del coronavirus quedaban reducidos al 50%. "Esta propuesta será estudiada por un equipo técnico, y también tratada con las asociaciones de vecinos de cada una de las zonas, para asegurar que la disposición propuesta no genera disconformidades en caso de que la misma implique algún cambio sobre la distribución o espacio original que ocupaba la terraza", manifestó entonces el primer edil.
Ahora, ya en la segunda fase, el Consistorio ha concedido hasta la fecha un total de 117 permisos para sacar más mesas y sillas de manera provisional. Y ello a pesar de que, debido a las limitaciones, la mayoría de establecimientos siguen sin abrir sus puertas. De hecho, una estimación ofrecida días atrás por el presidente de Abreca, Javier del Castillo, apuntaba a que en la ciudad estaría abierto poco más del 25 por ciento de bares y restaurantes.
Estricta normativa
La normativa establece que podrá procederse a la reapertura al público de las terrazas al aire libre de los establecimientos del sector, limitándose al 50% de las mesas permitidas. En todo caso, deberá asegurarse que se mantiene la debida distancia física de al menos dos metros entre las mesas. La ocupación máxima será de diez personas por mesa o agrupación de mesas. Se evitarán cartas de uso común, optando por dispositivos electrónicos propios, pizarras, carteles u otros medios similares.
También hay normas para la limpieza y desinfección de mesas y sillas, así como cualquier otra superficie que puedan ser ocupadas por diversos clientes. En cuanto al uso de los aseos, sólo podrán ser usados por una persona cada vez, salvo que la misma requiera un asistente, y deben limpiarse con una frecuencia especificada en un mínimo de seis veces diarias.
