Un juzgado de Benidorm ha imputado un delito de odio a los dos policías locales implicados por los insultos a una mujer transexual, según han confirmado fuentes cercanas al caso. El agente que profirió los insultos fue arrestado el viernes por la noche tras ir a prestar declaración en la Comisaría de Benidorm y este sábado por la mañana ha quedado en libertad provisional a la espera de juicio.
El otro funcionario, que presuntamente grabó la escena en el móvil, quedó en libertad tras la comparecencia en dependencias policiales y en próximos días tendrá que comparecer ante el juzgado de Instrucción número cuatro de Benidorm, que ha asumido las actuaciones.
La investigación se puso en marcha de oficio por la Policía Nacional a raíz de que ayer por la tarde empezara a circular un vídeo por las redes sociales en las que un policía local se dirige de manera despectiva desde el vehículo a una persona transexual que se encontraba en la calle Tomás Orts Llorca de Benidorm, mientras su compañero graba la escena con el móvil.
En el vídeo, se puede ver al agente profiriendo frases como "de día eres todavía más feo, eres horrible", ¿qué hacéis ahora que no podéis jalar pollas ni robar?" y termina con un "¡Que te vayas, cerdo!", cuando el compañero exige que deberían denunciarle por saltarse el confinamiento. Unas imágenes que causaron gran indignación en las redes y que acabaron provocando la detención del funcionario, una vez que pudo ser identificado.
El agente ha comparecido por videoconferencia ante el juzgado de guardia este sábado por la mañana y se ha acogido a su derecho a no declarar. Sin embargo, el abogado de los dos policías, Francisco González, anunció a este diario que iba a pedir al juzgado el archivo de las actuaciones al considerar que estos hechos no constituyen un delito de odio.
"Es cierto que hay una manera incorrecta por parte del agente de dirigirse a esta persona, pero esto no es un delito de odio", ha asegurado el letrado. Desde la defensa se incidió en que la persona transexual ya había sido sancionada en numerosas ocasiones por incumplimientos del confinamiento del estado de alarma tanto por la pareja de policías locales, como por otros compañeros. Las mismas fuentes indicaron que momentos antes de la escena grabada en vídeo era ella quien les había insultado a ellos y que el vídeo únicamente se grabó para documentar la actuación policial.
