Incendios urbanos con rascacielos, inundaciones en barrancos, fuegos en masas forestales o el transporte de mercancías peligrosas son algunos de los riesgos a los que se enfrenta Benidorm cada día debido a su fisonomía y ubicación. Unas situaciones de emergencia para la que hay que marcar soluciones rápidas que permitan garantizar la seguridad de las personas, pero también de los bienes o el propio entorno. Para ello, el Ayuntamiento ha modernizado su Plan Municipal de Emergencias y ha marcado hasta 10 situaciones de riesgo que se pueden dar en la ciudad para dar una respuesta eficaz y rápida.

El anterior plan local era de 2007 y tenía que ser actualizado para lo que se ha trabajado conjuntamente con Dinapsis Operation & Lab, del grupo Suez, para que elaborara este nuevo documento que identifica las vulnerabilidades, los posibles impactos y los denominados efectos en cascada para la ciudad.

Entre las situaciones de riesgo que se pueden dar en la capital turística está la de los incendios urbanos, sobre todo por la cantidad de rascacielos con los que cuenta la ciudad. El documento recoge que el municipio es la tercera ciudad europea con más edificios de este tipo, 310 inmuebles de más de 35 metros de altura, lo que «hay que considerar como un riesgo» si se produce un incendio. A ellos se suman también los incendios forestales debido a la cantidad de masas de arbolado de la ciudad como el parque natural de Serra Gelada o el Murtal, entre otras.

Pero también se remarca el peligro de las inundaciones en los barrancos, sobre todo, en el Derramador o Barceló. Entre esas 10 situaciones marcadas también tiene riesgo alto el transporte de mercancías peligrosas, debido a las dos vías principales de circulación como la antiguo AP-7 y la N-332; o los eventos con concentración de personas, entre otras. En el Plan Municipal se planifican los medios técnicos y humanos de los que dispone la ciudad y se establece cómo actuar ante situaciones de emergencia para garantizar la calidad de vida, la seguridad y el bienestar de las personas y también del entorno y los bienes. Además, se pretende que, si se da una de estas situaciones, se vuelva «a la normalidad en el menor tiempo posible». La operativa del mismo es la coordinación entre todos los agentes implicados, desde el Ayuntamiento hasta la Policía, Bomberos o servicios de emergencias a los que se unen las empresas de servicios.

El plan también marca la creación de un Centro de Coordinación Cooperativa Municipal (Cecopal) así como los medios de difusión si hay una emergencia (redes sociales, megafonía o avisos «in situ», entre otros); o los puntos de concentración para las personas, ubicados, por ejemplo, en la plaza SSMM Los Reyes de España.

Nuevas tecnologías

Una vez actualizado el Plan de Emergencias, el futuro a medio y largo plazo pasa por la «sensorización» de todos los servicios para que, a través de herramientas tecnológicas, todos los agentes implicados dispongan de forma inmediata de toda la información en dispositivos móviles para que la toma de decisiones sea más ágil y eficaz. Una sensorización que ya opera en la gestión de los servicios del ciclo del agua.

Este nuevo plan se presentó ayer a manos del alcalde, Antonio Pérez; el director de Dinapsis, Joaquín Marco; el TAG de Seguridad Ciudadana y Emergencias del Ayuntamiento, Manuel López; y el técnico de Dinapsis, Miguel Balaguer. También contó con la presencia del concejal de Seguridad, Lorenzo Martínez, y miembros de la Policía Local, el Consejo Vecinal y otra asociaciones locales. Pérez destacó que este documento es «un ejemplo de colaboración público-privada», en la que Benidorm ya es referente en materia turística y de gestión del agua.

Alerta

Algunas situaciones a tener en cuenta:

- Transporte de mercancías peligrosas.

- Incendios forestales debido a las masas de árboles y naturaleza.

- Inundaciones en barrancos.

- Riesgo sísmico.

- Contaminación marina accidental.

- Concentración de masas en los eventos.

- Incendio urbano por el número de rascacielos.

- Deslizamiento o desprendimiento.