Malestar en la Policía Local de Altea. La totalidad de la plantilla de policías del municipio se ha visto "perjudicada" por "una decisión unilateral del concejal de Recursos Humanos y Personal, Rafael Mompó, al eliminar mediante una providencia enviada a la Jefatura las retribuciones económicas de enero, y con efecto retroactivo hasta noviembre pasado, de los complementos de nocturnidad, horas extra y prolongación de jornada", según señalaron el pasado jueves por la noche los representantes sindicales de la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) en la que están los agentes.

Los policías que estaban fuera de servicio en su jornada de 8 horas aprovecharon el jueves la celebración del pleno ordinario de enero de la corporación municipal para visibilizar su malestar ante los concejales y reivindicar sus derechos "adquiridos y consensuados desde 2007". En el pleno, el portavoz del grupo municipal, Jesús Ballester, señaló que la decisión del edil Mompó (Compromís) "perjudica las retribuciones económicas consensuadas con la Policía Local, e indirectamente perjudica a la ciudadanía y la seguridad ciudadana" pues "en estos momentos el retén está cerrado y no hay coches patrulla por el pueblo".

Por su parte, Rafael Mompó indicó que no se han eliminado las retribuciones económicas de los agentes "sino que se han paralizado provisionalmente hasta que veamos qué hay de cierto en unos informes sobre la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) donde dicen que hay duplicidad de retribuciones". Tras el pleno, el alcalde Jaume Llinares dio la palabra a los representantes sindicales de la Policía Local y lo primero que pidieron fue "el cese del concejal Mompó en su delegación de Recursos Humanos y Personal" porque "no tiene empatía con nuestro colectivo y no siente respeto por nosotros ni por nuestro trabajo". Después reivindicaron "los acuerdos firmados con las distintas corporaciones, tanto del PP como del PSOE desde 2007, en los que se nos gratificaba por los servicios extraordinarios de prolongación de jornada, horas extra y nocturnidad", y afirmaron que en el caso de negociar dicha reivindicación de nuevo "solo hablaremos con el alcalde, pues al concejal no lo queremos en las conversaciones". Los agentes anunciaron, asimismo, que a partir del próximo lunes "dejaremos de realizar los servicios extraordinarios y alargamiento de jornada, cumpliendo solo con la jornada laboral de 8 horas".

Tras el pleno, los representantes policiales señalaron a INFORMACIÓN que "no nos quejamos de que nos hayan quitado 480 euros de nuestras nóminas por los complementos de productividad que hacemos añadidos a la jornada normal. Nos quejamos por las formas en que nos han tratado, por cómo nos lo han comunicado sin siquiera decirlo antes a los sindicatos y a la plantilla, y porque no nos han dado opción a negociar".

Los agentes indicaron que hay "un déficit de plantilla" porque se han jubilado varios compañeros y otros han vuelto a sus municipios de origen porque estaban aquí en comisión de servicios, "por lo que muchos duplicamos turnos por el bien de los ciudadanos". Actualmente hay 33 policías en activo, "y el número ideal para Altea, por la población que tiene, es de 51 agentes", apostillaron.

El alcalde Jaume Llinares explicó a este periódico que el concejal de RRHH "ha actuado de manera correcta y legal". Llinares explicó que cuando se hizo la última RPT a finales de la legislatura pasada (está recurrida ante la Subdelegación de Gobierno en Alicante) "se detectó que había duplicidad en el cobro de las nóminas de los policías, por lo que pedimos un informe técnico externo para que lo comprobara, como así fue, en la línea de lo que decían los técnicos municipales e, incluso, el Consell Jurídic Consultiu a quien también le pedimos el análisis de la situación".

El primer edil indicó que "no se han eliminado las retribuciones correspondientes a la nocturnidad, horas extra y servicios extraordinarios de los agentes, sino que se han retenido los pagos para evitar, tras un informe de la Tesorería del Ayuntamiento, tener que reclamarles la devolución del dinero si finalmente se comprobase que se les ha duplicado el pago". En este sentido, y ante la postura de los policías de no realizar ningún servicio extra, LLinares indicó que los policías "tienen diez días para presnetar las alegaciones pertinentes con sus abogados y sindicatos" y afirmó que "confío en que la situación se reconducirá. Entiendo su descontento, pero se buscará una solución".

Por último, sobre la merma de la plantilla policial, el alcalde anunció que se van a crear siete nuevas plazas de policía local "con las miras de llegar a la plantilla ideal de 51 agentes en Altea".