El Centro de Salud Pública de Benidorm, de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, ha procedido al cierre epidemiológico del brote de Fiebre Q que tuvo lugar en septiembre pasado en la partida Gasparot de La Vila Joiosa.

El informe concluye que las medidas preventivas implantadas «resultaron eficaces» para el control del brote infeccioso, según ha avanzado hoy el concejal de Medio Ambiente, José Carlos Gil.

Además, el citado informe pone de manifiesto que se trató de un brote de Fiebre Q con siete casos confirmados, todos ellos adultos de entre 33 y 44 años, y ningún menor afectado.

El contagio se asocia a la exposición a un foco de ganado caprino cercano al lugar de residencia de seis afectados, que vivían en el mismo edificio, y una persona más que frecuentaba dicha zona.

El análisis positivo de uno de los animales confirmó el foco, sin detectarse otros focos de animales.

Todos los afectados evolucionaron de forma favorable, aunque debido a las características de la enfermedad, algunos continúan con un seguimiento para descartar la cronicidad.

El concejal ha señalado además que el Ayuntamiento estudia la posibilidad de emprender acciones legales «contra quienes afirmaron que se había contagiado un menor», algo que ha resultado no ser cierto puesto que «el único objetivo era dar una imagen de inseguridad en la ciudad».