¿A quién no le ha ocurrido alguna vez enviar algo a la persona o el grupo de WhatsApp equivocado? A Samantha, una madre británica que estaba de fiesta en Benidorm, un fallo así le ha hecho ser noticia en medios de todo el mundo al enviar accidentalmente imágenes de un show de sexo en vivo al grupo del equipo de fútbol de su hijo, cuyos integrantes son todos menores de 7 años.

La mujer, de 37 años, estaba de marcha en Benidorm cuando a la una y cuarto de la noche decidió compartir un vídeo subido de tono con un grupo de amigos suyos en WhatsApp.

No se dio cuenta hasta la mañana siguiente de que había enviado el archivo a un grupo de niños, cuando se despertó con una serie de mensajes de su confundido esposo James.

"Todos sabemos que estás en Benidorm, Sam, pero no creo que estas imágenes sean apropiadas para un grupo de equipos de fútbol menores de 7 años. ¿Grupo equivocado quizás? Por favor, ¿puedes eliminarlos?", le pidió desde su casa en Rothwell, Leeds.

Samantha, que trabaja en una empresa de cosméticos, se disculpó con el grupo y escribió: "Lo siento mucho, obviamente, lo mandé al grupo equivocado. He eliminado las imágenes, pero es probable que tú también necesites hacerlo".

Sin embargo, alguno de los infantes hizo una captura de pantalla antes del borrado y lo publicó en las redes sociales, donde la anécdota se convirtió en viral y de ahí dio el salto primero a numerosos medios británicos y luego a otros de distintas partes del mundo, desde México hasta Japón.

Una fuente cercana al grupo aseguró a The Sun que Samantha "estaba absolutamente mortificada cuando se dio cuenta de lo que había sucedido. Cualquiera que se levante después de una noche intensa en Benidorm podría estar preocupado por lo que sucedió la noche anterior, y sus temores se hicieron realidad cuando vio el mensaje pidiéndole que borrara las imágenes".

Algunos medios sensacionalistas británicos aprovecharon la historia para hablar de "Beni-Porn", una ciudad que "se ha vuelto famoso por sus espectáculos sexuales de mala calidad y borracheras".

"Varios clubes muestran strippers vestidos como personajes famosos de películas que participan en actos sexuales mientras están en segways", publican el Daily Star y The Mirror, entre otros.

El mismo medio añade que en la capital de la Costa Blanca "hay gángsters que usan a mujeres, haciéndose pasar por trabajadoras sexuales, para atacar a los británicos borrachos", por lo que se les recomienda "que usen aerosoles en un intento por combatir a los potenciales asaltantes".