Las puertas de la Iglesia de San Jaime y Santa Ana se volvieron a abrir ayer para que los patrones de Benidorm pudieran realizar la procesión en honor a Sant Jaume. En orden inverso al del domingo, la Virgen del Sufragio salió la primera del templo para dejar paso al santo que recorrió las calles de la ciudad bajo la atenta mirada de fieles, vecinos y turistas.

La devoción por el patrón de Benidorm es mucha y ayer se pudo ver durante el recorrido y en aquellos que acompañaron a la imagen en la Procesión de la tarde del día grande de Sant Jaume. Sobre las 19.00 horas, los primeros fieles tomaron la calle Mayor. Los primeros las autoridades religiosas, un grupo de «manolas» de negro y mantilla, así como los Mayorales de Honor y otros miembros de entidades. En el acto participó también el abanderado de este año, Vicente Berenguer, con toda su familia así como el pregonero, Francisco Amillo, y la suya.

Como cada año, y a la inversa de lo que ocurre el domingo de las Fiestas Mayores Patronales, en la procesión del lunes la imagen de la Mare de Déu del Sofratge es la primera en salir de la iglesia para emprender el camino a hombros de sus «mariners». Luego es Sant Jaume el que salió por la puerta de la plaza que lleva su nombre sobre los «costalers» que cada año acompañan al santo y que llevan sobre ellos los 500 kilos de la imagen del patrón.

En la puerta del templo, decenas de personas esperaban ver salir al patrón, una talla que este año luce completamente renovada. Así, el domingo ya se pudo ver el nuevo aspecto pero ayer además cobró todo el protagonismo. Y es que en los últimos meses se ha llevado a cabo una restauración de la misma por parte de un taller de Elda para remodelar algunas partes dañadas y poder mejorar su aspecto que se había deteriorado por los años.

«Els Costalers» de Sant Jaume, formado por 62 adultos y 15 niños, fueron los promotores de esta restauración que se inició nada más celebrarse el día de la festividad del santo, el pasado 25 de julio. Ese mismo día, en 1940, se estrenaba la actual imagen, ahora restaurada, en una procesión especial. .

Recorrido más corto

Las calles se llenaron de fieles para poder ver la imagen. El recorrido de ayer fue por las calles Mayor, Alameda, Paseo de la Carretera y Santa Faz para volver a la plaza de Sant Jaume que se fueron llenado de público para acompañar en procesión al santo y pedir su protección. El acto duró menos que la de la Mare de Déu del domingo ya que tiene un recorrido más corto.

Al santo también le acompañaron miembros de la Corporación municipal con el alcalde Antonio Pérez, así como el presidente de l'Associació de Penyes Verge del Sofratge, Coli Pérez; el de la Comissió de Festes Majors Patronals, Roberto Carretero; así como otras entidades festeras. También las Reinas Marina Carrillo y Paula Mayor honraron al patrón junto con sus cortes de honor ataviadas con el velo y con cirios en las manos.

La jornada dedicada al santo comenzó con una misa matutina y el volteo de campanas por la mañana. Al terminar el acto religioso, se encendió la tradicional «estampeta» de San Jaime con una traca y fuegos de fondo.