Altea acogió el pasado sábado por la noche, con gran éxito de crítica y público, el estreno mundial de la primera ópera escrita y representada en valenciano del siglo XXI: "Fra Pere el Descalç". Ochenta y cinco cantantes y músicos pertenecientes al Orfeó Valencià y la Orquesta de la Marina Alta (OMA) representaron en la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora del Consuelo esta obra basada en la figura del franciscano Pare Pere (Denia, 1582 - Valencia, 1658), uno de los personajes históricos más carismáticos y venerados por los ciudadanos de la capital de la Marina Alta, con libreto de Lluís Fornés "El Sifoner" y música de Francesc Estévez.

Coincidiendo con el 437 aniversario del nacimiento del Pare Pere, el altar de la parroquia se transformó para la puesta en escena de esta ópera dividida en dos actos y cuatro cuadros, que duró cerca de dos horas y que no defraudó a los más de 350 espectadores asistentes a uno de los acontecimientos culturales más importantes de Altea en el año en que el municipio es la Capital Cultural Valenciana. La representación operística contó con la financiación del Ayuntamiento de Altea y la Fundación Caixaltea, mientras que los asistentes aportaron voluntariamente un donativo de 10 euros cada uno que se destinaron íntegramente para sufragar las obras de restauración de la iglesia parroquial que se están realizando actualmente.

Un fraile en proceso de beatificación

La ópera repasó momentos de la vida del Pare Pere, calificado en su tiempo como un hombre "de vida admirable y siervo de Dios, predicador apostólico y comisario de Jerusalén en la santa provincia de san Francisco de Valencia". Fray Pere Esteve i Puig nació en Denia el 19 de octubre de 1582 y murió en Real Convento de San Francisco de Valencia en 1658. En 2006 comenzó el proceso de canonización y diez años después, tras su última exhumación realizada en junio de 2016 donde se mostraba que el cuerpo del franciscano permanece incorrupto, se comenzó el proceso de su Beatificación por el Vaticano. Precisamente, la ópera se inicia con un milagro del franciscano tras la aparición del fraile después de muerto al pintor de Xàtiva. A partir de ahí comienza la historia del Pare Pere, al que se le atribuyen hechos milagrosos como la sanación de los enfermos de una epidemia de cólera y peste acaecida en Dénia en 1633, su viaje a Tierra Santa en forma mística, o el milagro de la zarza sin espinas de Jesús Pobre.

Defensor de la Casa de Austria

Pero también la ópera traslada al espectador al momento en que el franciscano es llamado a la Corte de Madrid por el rey Felipe IV, ante quien se dirige en valenciano. O cuando la reina Isabel de Borbón toma el ermitorio de Jesús Pobre, donde oraba y vivía el Pare Pere, bajo su real protección. Y de cómo el fraile, defensor de la Casa de Austria, decide participar en la Guerra dels Segadors "con remedios curativos para los cuerpos y almas de los soldados", aparte de que en dicha guerra, al norte del Reino de Valencia, el Pare Pere no se mojaba ni cuando llovía ni cuando nevaba. Finalmente, la obra termina con la ascensión del fraile hacia el cielo cuando muere.

En este estreno de la ópera "Fra Pere el Descalç", el Orfeó Valencià estuvo dirigido por Josep Lluís Valldecabres, y Francesc Estévez dirigió a la Orquestra de la Marina Alta. Los cuatro papeles principales corrieron a cargo del barítono Vicent Antequera, que representó al Pare Pere; la soprano Gemma Soler, que encarnó a su madre; el tenor Vicent Romero fue Paborde Guerau; la mezzosoprano Adriana Mayer tuvo el papel de la mujer obscena; y el tenor alteano Jordi Alsina interpretó los papeles de fraile y soldado. La dirección de escena estuvo a cargo de Miguel Ángel Jiménez, y también se contó con la colaboración de Tarannà Teatre bajo la dirección de Lluís Fornés.

Próximamente en Dénia

La próxima representación se hará probablemente en Dénia, donde la devoción por el Pare Pere es muy grande. Para el compositor Francesc Estévez, "el único marco posible para la puesta en escena sería la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, donde está la tumba del fraile franciscano protagonista de la historia".

En el estreno estuvieron los alcaldes de Altea (Jaume Llinares), de Dénia (Vicent Grimalt) y de Jesús Pobre (Javier Scotto); un representante del Institut Valencià de Cultura; el editor alteano Josep Lanuza, impulsor del proyecto; el párroco de Altea, José Abellán; el presidente de la Fundación Caixaltea, José Miguel Cortés y la concejala de Cultura, Aurora Serrat; entre otros concejales del equipo de gobierno y una amplia representación del mundo de la cultura valenciana.