Es uno de los puntos más visitados y fotografiados por los turistas y un símbolo de la ciudad. Es el Castell de Benidorm, el origen del municipio, donde empezó todo. Se trata de un mirador sobre el Mediterráneo, lugar de visita casi obligada para quien no conozca la ciudad. Pero este año la archiconocida foto, en grupo o selfi, en el Castell que, como mandan las leyes no escritas de Internet, se cuelga de inmediato en las Redes Sociales no se puede realizar.
La razón, las obras arqueológicas que, con el fin de descubrir e investigar el pasado de Benidorm, se están llevando a cabo durante el verano. La fecha de fin, noviembre. De esta forma, cualquier turista despistado o poco informado, que se acerque hasta el Castell para conocerlo se encuentra obras; o dicho de otra forma, un solar.
Es más, en la propia web de turismo de la ciudad -Visita Benidorm- en el apartado Turismo Cultural y Urbano aparece el Castell como punto de interés, sin ninguna explicación de los trabajos arqueológicos.
Hay que recordar que Benidorm es la segunda ciudad de la Comunidad Valenciana, solo superada por Valencia, con mayor número de seguidores en Redes Sociales: Facebook, Twitter, Instagram y Youtube. Nada menos que 50.282 seguidores en Facebook, según los datos del barómetro del primer semestre del año de Turismo de la Comunidad Valenciana.
En el caso de Instagram, el feudo de los selfis, la capital del turismo de la Costa Blanca ocupa el tercer lugar, con 21.869 seguidores. València, con 30.209, y Alicante, con 23.328, están por delante en primer y segundo puesto.
Mientras se llevan a cabo los trabajos arqueológicos, lógicamente, no se puede acceder al recinto. Unos trabajos valorados en 1,2 millones de euros y subvencionados por la Unión Europea, en concreto, por los fondos Feder.
De hecho, es la UE la que marca los plazos, de ahí que la excavación se realice contrarreloj, dado que deben estar concluidos en noviembre. El objetivo, no es otro que buscar los restos de la primera fortificación, construida por el almirante Bernat de Sarrià en el año 1325. La actual obra incluye también la consolidación de una de las paredes de la Punta de Canfalli sobre la que se asienta el Castell. El proyecto prevé también la musealización de los restos que aparezcan de la antigua fortaleza, en función de valor histórico de los mismos.
Visitas guiadas
Con el fin de dar a conocer la excavación a los ciudadanos de Benidorm, el Ayuntamiento realizó recientemente visitas guiadas, con gran éxito de participación. En el transcurso de las mismas,. los arqueólogos encargados de los trabajos explicaron de primera mano en qué están consistiendo y dieron detalles los orígenes de la ciudad. El éxito de las visitas desbordó las previsiones, por lo que se prolongaron durante más días. Desde el Ayuntamiento, promotor de la iniciativa, no se han programado más visitas guiadas por un motivo, los plazos para terminar la obra que los marca la UE.
Hallazgos
En la campaña de trabajos, según la información facilitada por la arqueóloga Lourdes López, se ha descubierto piezas como el lienzo exterior de las murallas que delimitaban un recinto más amplio que el que ocupaba la tradicional Plaça del Castell. Además, en las zonas Este y Sureste se han localizado los restos de los muros originales y de varias de las estancias.
Desde el Ayuntamiento recuerdan que esta intervención arqueológica tiene como fin precisamente recuperar y poner en valor el Patrimonio histórico de Benidorm; un camino que se inició en Torre de les Caletes y el Castellum romano del Tossal de la Cala y que continúa ahora en el Castell de Benidorm.
Además de las visitas guiadas para, en cierto modo, compensar las molestias por una obra más en pleno verano en la ciudad -la excavación comenzó en junio- desde el Consistorio aclaran que estas prospecciones arqueológicas dotarán al lugar de un y mayor atractivo turístico. Dicho en otras palabras, la foto del futuro Castell incluirá también un repaso por la historia de Benidorm.
