La Guardia Civil está investigando en Altea a un hombre, español de 38 años, como presunto autor de un delito de maltrato animal a siete perros de caza.

La Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Altea, inició una investigación relacionada con un posible delito de maltrato animal, a raíz que una protectora de animales de La Nucía denunciara que en una finca de la localidad de Polop de la Marina habían localizado a siete perros en pésimas condiciones.

En la inspección ocular que los agentes realizaron sobre la finca y las perreras, comprobaron que, efectivamente, se trataba de siete perros de caza, 1 pointer y 6 podencos ibicencos, encerrados en unas casetas sin un techo que les cubriera del sol o de las fuertes temperaturas, y sin agua ni comida desde hacía varios días, según indicó la Guardia Civil en un comunicado.

El nivel de dejadez y abandono se pudo evidenciar todavía más cuando, junto a una de las perreras, encontraron un saco de plástico con un perro muerto en estado de descomposición, según las mismas fuentes.

Ese mismo día, los perros fueron sacados del lugar y trasladados hasta a la perrera de La Nucía, donde dos veterinarias emitieron informe sobre el deficiente estado higiénico-sanitario de los animales. Todos ellos presentaban leishmaniosis, algunos tenían daños en el riñón por falta de agua y deshidratación, y llenos de parásitos, pulgas y garrapatas, según la Guardia Civil.

La Guardia Civil investigó al dueño de los animales por un supuesto delito de maltrato animal, que quedó en libertad con la obligación de presentarse a requerimiento judicial.