Altea dio ayer el pistoletazo de salida a la competición que mantendrán durante este verano 45 municipios costeros de la Comunidad Valenciana para conseguir el galardón de la «bandera verde por la sostenibilidad» que ha creado la entidad sin ánimo de lucro encargada de la gestión del reciclado de los residuos de envases de vidrio en España, Ecovidrio, con el apoyo de la Generalitat Valenciana. Más de 4.800 establecimientos hosteleros (bares, chiringuitos y restaurantes) de estos municipios participarán en el Movimiento Banderas Verdes por la Sostenibilidad, cuyo objetivo es recoger para su reciclado el mayor número de envases de vidrio. Al final del verano, los dos municipios valencianos que hayan reciclado más kilos de vidrio recibirán el galardón de la Bandera Verde creado por Ecovidrio.
Para presentar el proyecto, al mediodía de ayer estuvieron en Altea la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, y el director general de Ecovidrio, José Manuel Núñez-Lagos, junto al alcalde de Altea, Jaume Llinares, y el resto de los miembros del equipo de gobierno.
Jaume Llinares señaló que a esta acción de concienciación y recogida de los envases de vidrio «le damos nuestro apoyo» y afirmó que «este año hemos aumentado un 11 % sobre las 858 toneladas recogidas el año pasado, de las que los bares, restaurantes y chiringuitos son los responsables de la generación de más del 50% de los residuos de envases de vidrio». Durante la presentación de la campaña, los organizadores destacaron que Benidorm fue el pasado año el municipio que más recicló.
