Rafael Balongo Lozano, concejal socialista del Ayuntamiento de Benidorm entre 1983 y 1991, falleció ayer a los 73 años de edad como consecuencia de una enfermedad que le fue diagnosticada hace apenas un mes.

Su marcha ha llenado de consternación a la familia socialista de la localidad, de la que Balongo era considerado uno de los «históricos», además de a amigos, allegados y familiares.

Nacido en Tetuán, en 1947, Balongo llegó llegó a Benidorm en el año 1972 para trabajar en una sucursal local de Banesto, de la que era empleado. Rápidamente se integró en la sociedad local y estuvo vinculado a numerosos colectivos sociales, culturales o deportivos, como al Benidorm Club de Fútbol o la Asociación de Amigos de Pueblo Saharaui, con la que realizó varias expediciones al desierto norteafricano para llevar víveres y enseres a los campamentos de refugiados.

Gran defensor de los valores democráticos, jugó junto a muchos compañeros un papel destacado en los inicios de la democracia dentro de PSOE local.

En 1983, Manuel Catalán Chana le fichó en la candidatura socialista, de cuyas filas fue concejal durante ocho años, hasta 1991, desempeñando, entre otras muchas, las delegaciones de Hacienda y Deportes.

Tras finalizar su etapa como edil, abrió, junto a su compañero Miguel Mozo, un despacho de administración de fincas, que ambos estuvieron regentando hasta su jubilación. Sus restos mortales fueron trasladados ayer al Tanatorio de la Marina Baixa, hasta donde acudieron ayer decenas y decenas de personas para darle su último adiós.

Balongo deja una viuda y un hijo, además de decenas de amigos, todos ellos muy consternados con su marcha. Sus allegados solicitaron que, por voluntad del propio finado, no envíen flores y que el dinero que tuvieran previsto invertir en ellas sea donado a alguna ONG u organización de carácter social, un gesto que agradecen.

Su despedida civil tuvo lugar ayer por la tarde, a las 19 horas, en las instalaciones del Tanatorio, tras lo cual sus restos mortales recibieron sepultura.