Las aguas se han calmado en el gobierno de La Vila Joiosa y el alcalde Andreu Verdú terminó ayer de dar forma al que será su ejecutivo para, en principio, los próximos cuatro años. Así, la que fuera la número dos de la lista del PSOE vilero y la actual secretaria local del partido, Isabel Perona, asumirá cuatro de las concejalías que aún quedaban sin delegar: Contratación, Seguridad Ciudadana, Industria y Atención a Residentes Europeos.
El primer edil recogía ayer en un decreto estas competencias para la que también ha sido nombrada portavoz de los socialistas y que ayer se estrenada en este cargo en el pleno extraordinario celebrado para aprobar la organización municipal para los próximos cuatro años. Estas delegaciones llegan más de una semana después de que el alcalde anunciara cómo iba a distribuir las competencias entre su gobierno y dejara a Perona sin delegaciones. Así, Verdú firmaba entonces un decreto en el que las competencias se repartían entre nueve de los diez concejales después de firmar el «Pacto de la Barbera» con Compromís y Gent per La Vila.
Con este delegación de competencias a Perona se cierra el tenso enfrentamiento que se ha mantenido abierto en el PSOE local y que arrancó con la votación para elegir candidato a liderar la lista ya que la edil y sus afines impulsaron al entonces concejal Joan Lloret contra Verdú en unas primarias que finalmente ganó el alcalde por dos votos.
Así, tras el pleno, el alcalde también repartió las tenencias de Alcaldía, la primera de ellas para Marta Sellés, una de las concejales de gobierno que gana más peso esta legislatura con ocho delegaciones a su cargo. Tras ella estarán por orden Pedro Alemany (Gent per La Vila), José Carlos Gil (Compromís) y los socialistas Isabel Perona, Vicente Sebastià, Mª Asunción Lloret y José Ramón Uclés.
Coste de los sueldos
El pleno de ayer sirvió además para aprobar los sueldos de los concejales. Como ya avanzó este diario, estos salarios subirán con respecto a la pasada legislatura y el total será más del doble que la pasada legislatura superando los 500.000 euros. El alcalde incrementará su salario hasta los 4.169,45 euros brutos al mes, 58.366 euros al año, un poco por debajo de lo que marca la Ley para los municipios de entre 20.000 y 50.000 habitantes; cobraba 53.000 euros brutos al año. Su gobierno contará con tres dedicaciones exclusivas para el PSOE: Marta Sellés, María Asunción Lloret y Aina Santamaría) y siete dedicaciones parciales para los socialistas Francisco Carreres, Vicente Sebastià, José Ramón Uclés e Isabel Perona; los dos ediles de Compromís José Carlos Gil, Josep Antoni Castiñeira; y el de Gent per La Vila, Pedro Alemany. Los tres primeros cobrarán 3.559,63 euros brutos al mes mientras que el resto tendrán un salario de 3.716,16 euros brutos al mes.
Además, como novedad, los dos grupos en la oposición, PP y Ciudadanos (Cs) contarán con una dedicación para cada uno de ellos de 1.785, 41 euros brutos al año. El resto de ediles cobrará por asistencia 700 euros por pleno, 50 euros por comisiones informativas, 50 euros más para los portavoces por cada Junta y se ha incrementado también la aportación a cada grupo municipal de 200 a 300 euros y la asignación por cada edil de 90 a 100 euros.
Perona explicó que el Ayuntamiento ha subido los sueldos a los ediles, sin llegar al nivel de 2011, tras la importante bajada registrada hace 4 años, entre otras cuestiones porque las cuentas ya no están bajo el Plan de Ajuste. «Tenemos que dignificar la figura del concejal, que trabaja duramente por sus vecinos», indicó el alcalde.
Además, el Ayuntamiento contará con siete asesores entre los que ahora habrá un Jefe del Gabinete de Alcaldía y un auxiliar de prensa que antes no existían. El resto será un cargo de confianza para cada grupo político.
