La AMPA del IES l'Arabí de l'Alfàs del Pi no quiere que los alumnos de Bachillerato y Ciclos tengan que ir en horario vespertino a clase a partir del próximo curso por lo que exigen al Consell que tome todas las medidas oportunas para que esto no ocurra. Entre ellas: adecuar las instalaciones del centro para que pueda albergar más estudiantes y así evitar este cambio de horario; incluso, con aulas prefabricadas dentro del recinto o en algún terreno adyacente.

La entidad emitió ayer un comunicado en el que muestran su «más rotunda oposición» a que se instaure ese horario de por las tardes, entre otras razones porque puede tener «consecuencias para los alumnos afectados y sus familias». Primero porque «dinamitaría» la conciliación familiar, «privaría» a los escolares de las actividades que realizan por las tardes relacionados, por ejemplo, con el deporte en «una etapa vital» de sus vidas y porque «quedarían expuestos a la vigilancia» de sus padres además de cambiar de forma «brusca» su rutina diaria y hábitos de estudio.

Aunque la AMPA del centro reconoce «los problemas de espacio», exponen que la decisión del Consell de cambiar los horarios «no sólo ha sido precipitada» sino que además se ha tomado «sin contar con todos los actores de nuestra comunidad educativa» lo que no les ha dado tiempo «suficiente para intervenir con conocimiento de causa».

Como ya publicó este diario, la decisión tomada por la Conselleria y la dirección del centro dejó sin opciones al alumnado y provocó la indignación de los padres, entre otras cuestiones, porque se comunicó solo a un día de que se abriera el periodo de matrícula. La ampliación de turnos en este IES vendría motivado por los «graves problemas de masificación y los riesgos derivados de esta situación». Con ella, los alumnos de Bachillerato y de FP, unos 200 alumnos de los cerca de 800 que tiene el centro, pasarían de tener las clases de 8 a 15 horas a estudiar de 15 a 21.

Los padres y madres alegaron que las cifras dadas para justificar esa saturación del centro no cuadran. Así explicaron que algunos documentos hablan «únicamente de 620 alumnos más el resto de personal docente y que en otros llegarían a unos 830». Así, añadieron que el problema de «masificación» se ha aplazado demasiado en el tiempo.

Con todo ello, entre sus peticiones está la de que se puedan disponer «aulas prefabricadas dignas y bien acondicionadas» en el recinto o en algún terreno adyacente para que la «situación temporal no vaya en contradicción con la tan luchada conciliación familiar». Además son muy claros: exigen a Educación «desista de la intención de establecer el horario de tarde» para los alumnos más mayores del centro el curso que viene porque las consecuencias del mismo «dañan de muchos modos y en muchos ámbitos» la vida y educación de los escolares.

Medidas urgentes

Desde la AMPA apelan además que las diferentes administraciones implicadas, como la local, territorial y autonómica, adopten «de manera urgente» las medidas necesarias para construir un nuevo IES que es lo que solucionaría «los problemas de escolarización» en Secundaria y bachillerato en el espacio «más corto de tiempo posible». Así añaden que «sólo con el diálogo, el consenso y las formas democráticas» se podrá encontrar una solución al problema. Unos alumnos que hace unas semanas se sumaron a la recogida de firmas lanzada por padres y madres en la puerta del centro y por internet para que el Consell construya otro IES que pueda atender la demanda y para que los alumnos no tengan que pasar un curso con clases por la tarde. Las familias alegaron que habrá hermanos en diferentes edades escolares que ni siquiera se vean en casa. Así que harán todo lo posible para que cosas así no pasen a partir de septiembre.