El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, ha defendido el acuerdo y el diálogo como los principales motores de la gestión a desarrollar en los próximos cuatro años, y ha apelado a que esos valores sean los que marquen el trabajo de todos los miembros de la corporación.

El reelegido alcalde ha tendido la mano a la oposición y ha señalado que la mayoría absoluta "no es un cheque en blanco", y que gobernar "no es sólo decidir, sino también buscar acuerdos".

No ha habido sorpresas en este pleno constituyente, tras la la mayoría absoluta de 13 concejales obtenida por Toni Pérez al frente del PP en los comicios del pasado 26 de mayo.

El respaldo de su grupo, en una sesión presidida por la popular Ángela Llorca como edil de mayor edad, ha sido suficiente.

Por su parte, el socialista Rubén Martínez ha recibido 10 votos, tantos como concejales obtuvo su formación en las elecciones, mientras que Juan Balastegui (Cs) no se ha postulado como candidato y tanto él como su compañera de grupo Ana Pérez, los dos ediles electos del partido naranja, han votado en blanco.

Toni Pérez ha reiterado su voluntad de "trabajar y luchar cada día para tener un Benidorm que conjugue el progreso económico y el bienestar de las personas que lo habitan".

Además, ha señalado que esto "no es una tarea individual", ya que "incumbe a toda la sociedad". Ha recordado, asimismo, que hace cuatro años, en que el PP inició gobierno con sólo nueve concejales de 25, "algunos auguraron que el bloqueo protagonizaría la vida política".

En este sentido, ha dicho que "lamento haberles defraudado", y ha reiterado que seguirá trabajando de forma "honrada" y con el mismo diálogo.