Con el reloj en contra por una subvención europea -que exige que la obra esté finalizada el 30 de noviembre- y a las puertas del verano, pese a tratarse de uno de los lugares más visitados por los turistas, Benidorm tiene previsto iniciar en un plazo de 15 días la intervención arqueológica en la zona del Castell para buscar los restos de su primera fortificación, construida por el almirante Bernat de Sarrià en el año 1325 y que propició la fundación de la villa que hoy es Benidorm.

La junta de gobierno local ha adjudicado la ejecución de este proyecto a la UTE formada por Orthem y Wenceslao García. Será la encargada de excavar para descubrir los restos de la antigua fortaleza que haya bajo el pavimento de El Castell, investigarlos y documentarlos; así como la posterior consolidación del conjunto y la musealización de todo el entorno. El proyecto está valorado en 1,2 millones y tiene una subvención de 500.000 euros procedente de los fondos Feder. Se ejecutará en un plazo de 3 meses y prevé levantar todo el pavimento del Castillo. Aunque, eso sí, en varias fases, de modo que el paso y tránsito de visitantes no se tenga que ver interrumpido, sino que pueda ser compatible con los trabajos.

La concejal de Patrimonio Histórico, Ana Pellicer, cuyo departamento lleva más de un año trabajando para que este proyecto pueda finalmente ver la luz, explica que la intervención se desarrollará en cuatro líneas de actuación. La primera es la limpieza y desbroce de la zona en la que se localizan los restos de la muralla, en el lado de la Punta Canfali, que coincide con las plazas del Castell y Castelar. La segunda, y la de mayor envergadura, es la excavación de la Plaça del Castell, donde se localizarían los niveles más antiguos del conjunto defensivo, según consta en la documentación histórica y la intervención arqueológica realizada en el año 1993.

En tercer lugar, se han previsto sondeos arqueológicos en las plazas de Santa Ana y Castelar y en el mirador situado más al sur, con el objetivo de confirmar o descartar la presencia de restos de torres y otras construcciones. Finalmente, la última fase de actuación se centrará en la consolidación de los taludes de la Punta Canfali.

Además, y como mejoras, la adjudicataria instalará iluminación en todo el conjunto de la Punta Canfali, y también bancos, papeleras y farolas en este ámbito de actuación, según prevé el contrato.

El germen

La primera constancia que se tiene de esta fortificación se remonta a la primera Carta de Poblament de Benidorm, otorgada por Bernat de Sarrià el 8 de mayo de 1325, en la que se documenta que no existía ningún edificio en la «Punta de Alfalig» y que el Almirante había ordenado construir en dicho lugar un castillo. Con el paso de los años, el mismo pasó por numerosas manos y fue foco de atracción de la piratería. «Las exhumaciones arqueológicas hechas en 1993 y 2014 pronostican que las actuaciones propuestas nos ahora van a permitir localizar restos interesantes desde el punto de vista histórico y patrimonial, aunque no sabemos en qué estado se encuentran, ya que no hay que olvidar que la fortificación fue destruida a cañonazos por el ejército británico hace 200 años, durante la Guerra de la Independencia, y que las ruinas han estado expuestas al deterioro medioambiental y humano durante más de un siglo», recuerda Pellicer. En concreto, hasta 1928, cuando el entonces alcalde Vicente Llorca Alós promovió su remodelación, enterrando toda la antigua estructura y dando forma a la actual fisonomía del Castillo.

Intervención en el Castellum romano del Tossal de La Cala

La junta de gobierno también ha adjudicado a Urbana de Exteriores, con un presupuesto de 500.000 euros, la intervención arqueológica en el Castellum del Tossal de La Cala, que culmina las diferentes campañas de excavación que realizadas de la mano de la UA, con la musealización de todo el entorno. Además, también se ha aprobado un gasto de 306.000 euros para licitar el proyecto de estabilización de los taludes de El Tossal, que presenta grave riesgo de desprendimientos en la calle Luarca.